A las 8:30 a. m. los taxistas informales que cerraban el paso por la carretera de Circunvalación desde las 7 a. m., a la altura de Hatillo 6, desistieron del movimiento ante la llegada de más de 70 oficiales de la Unidad de Intervención Policial (UIP) para restablecer el orden.
Los agentes llegaron en dos microbuses y se unieron a los policías que desde el momento en que se inició el bloqueo apoyaron a la Policía de Tránsito.
Por más de una hora, los informales estuvieron en el sitio, lo que causó un gran congestionamiento en sectores como barrio Cuba, calle Los Negritos, La Sabana y otros puntos que comunican los barrios del sur con la capital.
Edgar Méndez, vocero de los manifestantes, afirmó a las 8:30 a. m. que se retiraban para evitar problemas y más tarde verán si vuelven a cerrar vías.
Añadió que lo único que piden es un permiso para trasladar personas desde un punto específico hacia San José. "Si el Gobierno quiere ladrones y maleantes en las calles lo van a tener", dijo.
Lo anterior en el sentido de que se trata de personas sin estudios que necesitan llevar algo a sus familias y se dedican al transporte en zonas como Pavas, Hatillo, León XII y otros sectores hacia San José.
Monge pidió a las autoridades del Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) una cita para explicar la situación que afrontan.
El director de la Policía de Tránsito, Mario Calderón, afirmó que su deber es cumplir la ley y seguirán bajando placas a los transportistas que no cuenten con los permisos correspondientes.
De momento, el paso está rehabilitado por la Circunvalación y las demás vías están sin problemas de cierre aunque algunas presentan congestionamiento por el efecto de rebote.