Primeros buses eléctricos comenzarán a brindar servicio a partir de noviembre en tres rutas de la GAM

Unidades donadas por el Gobierno alemán llegaron el sábado en la noche al país

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Los primeros tres buses eléctricos que prestarán servicio en el país ya llegaron y a partir de noviembre comenzarán a circular en tres rutas de la Gran Área Metropolitana, dentro de un plan piloto.

Las unidades, donadas por el Gobierno de Alemania, operarán durante cuatro meses en cada ruta, primero en el trayecto San José- Desamparados, después se trasladarán al recorrido San José -Tres Ríos, en Cartago, y de último serán utilizadas por los pasajeros que viajen entre San José y Alajuela (por el Invu).

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Claus Kruse, director del proyecto MiTransporte, de la Cooperación alemana GIZ, explicó que entre los cambios que percibirán los usuarios es que se trata de buses más confortables, que generan menos ruido porque no tienen motor de combustión interna, la plataforma para subir es más cercana a la acera y la vibración durante el recorrido también es mínima.

Las nuevas unidades además poseen asientos más espaciosos y puertos USB para cargar el celular.

“Hay muchas diferencias, nos hemos preocupado que sea material antialérgico, cómodo, con todas las características de seguridad, tiene más espacios para silla de ruedas, es un bus como se maneja en cualquier ciudad europea”, añadió Kruse.

Las unidades tendrán capacidad para 81 pasajeros (incluidos los que van de pie).

¿Cómo funcionará el piloto?

De acuerdo con el director del proyecto, las tres empresas de buses que fueron seleccionadas para llevar adelante el plan debieron superar varios procesos de selección.

A ellas se les prestarán dos buses durante los tiempos mencionados. La tercera unidad quedará como respaldo en caso de avería, choque u otro imprevisto y mientras será usada a modo de prueba en otras rutas con topografía distintas, así como en capacitaciones con choferes y mecánicos.

Mientras tengan las buses eléctricos, las empresas deberán sacar de circulación el mismo número de buses de diésel; además se les suministrarán dos estaciones de carga.

En total, cada unidad trae una estación y se adquirieron dos adicionales.

Los costos asociados al uso ordinario, como por ejemplo lavado y la carga, serán cubiertos por las empresas.

Si tuvieran que incurrir en gastos adicionales, estos serán financiados con fondos de la cooperación alemana.

“Está previsto que carguen de noche, si el costo de esa electricidad saliera más alto que el diésel que consumirían los otros dos buses, la diferencia la asumiría el proyecto, la intención es que opere sin que le genere costo al empresario”, explicó Kruse.

La capacidad de estos automotores les permite recorrer hasta 250 km con una sola carga. Las rutas seleccionadas, dijo el director del proyecto, recorren alrededor de 200 km al día.

Al cabo de un año, cuando se completen los tres períodos en que las unidades estarán en cada ruta, las mismas serán retiradas para comenzar a analizar la data generada, a fin de que empresarios y el sistema de transportes puedan definir la hoja de ruta que resultará más conveniente en el marco del plan de descarbonización.

Además de las tres unidades donadas por Alemania, se tenía previsto que concesionarios de 12 empresas de buses adquirieran 12 unidades adicionales que entrarían en operación a final de año.

Sin embargo, debido a la pandemia, dicha iniciativa quedó en pausa, pues las empresas autobuseras han visto reducidos sus ingresos hasta en un 80%.

Cada una de esas unidades tiene un valor cercano a los $400.000.

Las empresas que habían confirmado el interés en invertir en las nuevas unidades son Lumaca, para la ruta San José-Cartago; Tuasa, para el recorrido Alajuela - aeropuerto Juan Santamaría - San José; Pulmitan, en la ruta del aeropuerto Daniel Oduber a Liberia; Transvi entre San José - Calle Blancos y Autotransportes Moravia, para los viajes entre ese cantón y la capital.

A estas se sumaban Transportes 205, que brinda servicio entre San José y los Hatillos; la empresa Guapileña entre Guápiles y Puerto Viejo de Sarapiquí; Lared, entre San José y Barrio Escalante; Tapachula, entre San José y Escazú; Tracsa para la ruta entre Guápiles – Siquirres; Contrasuli, Ciudad Colón – San José; y Transtusa, entre Turrialba y Juan Viñas.

Como parte de la iniciativa, el Gobierno había ofrecido a las empresas concesionarias facilitar estaciones de recarga y tarifa plana.

Además, contarían con el acompañamiento técnico del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) y el Instituto Nacional de Aprendizaje (INA) tanto en la instalación de las estaciones de carga como en el mantenimiento de las unidades.

En tanto, la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep), tenía pendiente la definición de la tarifa de recarga eléctrica en los planteles de las empresas concesionarias.