Levante el teléfono, marque 911 y denuncie las quemas ilegales y los incendios forestales.
Una acción tan sencilla podría frenar el avance del fuego en bosques y áreas silvestres protegidas.
El Ministerio del Ambiente y Energía (Minae) lanzó en esta semana una campaña en prensa y redes sociales, a fin de frenar la incidencia y el total de hectáreas afectadas por los incendios forestales.
Según explica Luis Diego Román, de la Comisión Nacional sobre Incendios Forestales, todas las quemas requieren un permiso del Minae o del Ministerio de Agricultura –si son tierras para cultivos–.
Si no hay permiso, el infractor se expone a una sanción de entre diez y 100 días multa (de ¢126.466 a ¢2.529.200), según lo establece el artículo 399 del Código Penal.
La campaña incluye anuncios en los que se invita a los ciudadanos a denunciar las quemas ilegales y a cooperar con el financiamiento de los bomberos forestales.
Por ejemplo, equipar a un bombero con pantalón y camisa de algodón, botas, casco, guantes, anteojos y machete cuesta, aproximadamente, ¢100.000. Si se compra ropa con tecnología ignífuga (que protege contra el fuego), el monto sube a ¢400.000, dijo Román.