El Instituto Nacional de Seguros (INS) acordó pagarle el boleto aéreo a Édgar Brenes André para que viajara desde Francia a Costa Rica a prestar juramento como directivo de la institución y regresara a ese país a atender asuntos personales.
La decisión la aprobó la junta directiva del INS el 7 de junio, luego de recibir el aval de la Contraloría General de la República.
Cuando Brenes viajó a Costa Rica no era funcionario público, pues se adquiere esa condición después de prestar juramento al cargo.
A pesar de ello, el órgano contralor autorizó el gasto pues adujo que no se trataba de una decisión personal, sino prácticamente una exigencia laboral la que fundamentaba el reconocimiento del gasto.
El INS justificó que sin la juramentación de todos los miembros, la junta no podía sesionar, lo cual podría implicar serios perjuicios para la institución y sus clientes.
Guillermo Constenla, presidente ejecutivo del INS, reconoció que él fue el de la iniciativa de cubrir los gastos de transporte para que el futuro director viniera a Costa Rica, dada la urgencia que tenía la entidad de integrar la junta.
Agregó que de esta dependen múltiples decisiones indispensables para la buena marcha de la empresa, como la aprobación de aseguramientos de riesgos con valor mayor a los $50 millones y atención a los reclamos, así como el visto bueno a las licitaciones públicas.
“El señor Brenes nunca puso condiciones de ningún género. A él se le informó del aval de la Contraloría y de que el INS se responsabilizaba de los gastos”, dijo Constenla.
Los costos del viaje fueron estimados en $1.895 (¢1 millón). Cubren el costo del tiquete aéreo para venir al país y regresar a Francia.
Por su parte, Brenes, quien ya fue fue juramentado, manifestó que no vio ningún inconveniente en que se le pagara el boleto puesto que existía una aprobación previa de la Contraloría, en razón del interés institucional. Según dijo, el INS aún no le ha reintegrado el dinero.
Al momento de su nombramiento, Brenes se encontraba en Francia atendiendo asuntos personales y su regreso estaba programado para finales de junio.
El 20 de mayo, Constenla pidió autorización a la Contraloría para pagarle los gastos de viaje y que este acudiera a juramentarse.
De acuerdo con esa solicitud, Brenes debía viajar a Costa Rica el sábado 22 de mayo y prestar juramento en la sesión del Consejo de Gobierno del martes siguiente.
“Se hace imperioso cubrir los gastos del señor Brenes André para que venga al país a cumplir con su deber y posteriormente pueda regresar a concluir con las obligaciones que hasta finales de junio tiene adquiridas en Francia”, argumentó Constenla.
El funcionario expresó que como la Contraloría avaló el pago del boleto al nuevo directivo para que viniera a aquella ceremonia y así integrar la junta, no se consideró “necesario plantear el asunto ante el Consejo de Gobierno”.
Esta normativa permite darles condición transitoria de “sujetos beneficiarios” del pago de viáticos o gastos de transporte a quienes en principio no les corresponde.
Dicho órgano también avaló que el INS le pagara a Brenes el viaje de regreso a Francia, a pesar de que volvía a esa nación a atender asuntos personales y, por tanto, no existía ningún interés institucional que justificara el gasto.
Freddy Coto, uno de los directivos presentes en la sesión en la cual se discutió el tema, se opuso al pago del tiquete aéreo a Brenes.
Arguyó: “Sobre todo, porque estamos autorizando el pago de un transporte para una actividad personal de un director, cuya responsabilidad al haber aceptado que se propusiera su nombre y se designara por el Consejo de Gobierno, es estar aquí para que lo juramenten”.
El ente contralor sí advirtió que no correspondía reconocerle gastos de alimentación y hospedaje.