Ya pasó un año y medio desde la tragedia en la soda Don Luis, en El Carmen de Alajuela, donde la explosión de un único cilindro de gas, aparentemente fisurado, mató a cinco personas.
El trágico accidente del 21 de enero de 2013 reveló la urgencia de fijar reglas de seguridad para el manejo del gas en el país. No obstante, transcurridos los meses, la premura parece haberse diluido.
Las fugas de gas son cada vez más frecuentes, pero todavía no hay rastro de una normativa que regule el mercado y obligue a las compañías e instituciones a supervisar la calidad y seguridad del envasado.
La herramienta que serviría para ello está estancada, luego de dos intentos fallidos de elaborar un reglamento por parte del Minae y un proyecto de ley pendiente de trámite en el puesto 43 de la agenda del plenario legislativo.
Este año no se han registrado muertes por escapes del gas licuado de petróleo (GLP). Sin embargo, a agosto pasado, el Cuerpo de Bomberos había atendido 3.333 accidentes por fugas.
Esa cifra gana importancia si se toma en cuenta que ya superó las emergencias del 2012 y es casi la mitad de las ocurridas en el 2013. Este fue el año más crítico por escapes de gas, incendios y muertes por mal manejo del GLP.
El año pasado, los escapes en los cilindros fueron la tercera causa de incendios y, en total, cinco personas fallecieron por accidentes relacionados con el hidrocarburo: las víctimas de la soda Don Luis.
A enero del 2013 se registraban 475.000 usuarios de gas para cocina, según el Ministerio de Ambiente y Energía (Minae). A lo largo de ese año histórico, Bomberos atendió 19 fugas diarias del hidrocarburo.
“Las emergencias han aumentado en los últimos dos años de forma exponencial, desde que entraron más empresas a competir. Estas cifras bajarían en un 91% con solo prohibir la válvula de acople rápido, la más común ”, dijo Héctor Chaves, jerarca de Bomberos.
La segunda causa de accidentes son las mangueras en mal estado; le sigue el deterioro de cilindros.
Larga historia. Héctor Chaves recordó que actualmente el Minae trabaja en la redacción de un tercer reglamento, “tomándose un tiempo prudente”.
Los otros intentos quedaron engavetados en los últimos días de los dos gobiernos anteriores, por errores o por apelaciones no resueltas.
La tercera versión está en manos de la Dirección General de Transporte y Comercialización de Combustibles.
Una vez redactada, pasará a conocimiento del Ministerio de Economía, Industria y Comercio.
En su revisión actual participan, desde mayo pasado, otras entidades como el Ministerio de Salud y la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep). La promesa oficial es concretar una reunión en los próximos días para acordar un texto definitivo.
Irene Cañas, viceministra del Minae, explicó que aunque el reglamento es urgente, está dando trámite a las distintas observaciones.
“El texto (reglamento pasado) fue revisado, se está retrabajando, y se espera tener la versión final pronto para proceder con las autoridades a su aprobación”, declaró.
Isaac Castro, viceministro de Economía, recordó que el tema de seguridad no solo incluye las válvulas, sino también el tipo de instalaciones y aditamentos usados, y la capacitación de los encargados.
La cartera de Salud es la que debe otorgar los permisos de funcionamiento a industrias, comercios y actividades en las que se use el gas.
“Abogaremos para que se usen las mangueras y válvulas adecuadas para cada aplicación, de modo que se garantice la seguridad”, dijo Ricardo Morales, jefe de la Unidad de Normalización, de Salud.
La única acción tangible del Minae en este campo fueron las inspecciones del 2013, cuando correspondía renovar concesiones a las firmas distribuidoras.
Por su parte, desde finales del 2012, la Aresep puso en marcha un programa de calidad con revisiones anuales y visitas mensuales a las siete plantas de envasado, para verificar estado y contenido de los cilindros.
Ese programa no vigila deberes ni descuidos por parte de los usuarios, consideradas por las autoridades como claves para garantizar un manejo adecuado del gas licuado de petróleo (GLP).