Aunque es una entidad todavía en planos constructivos, el Hospital del Trauma S.A., ya cuenta con un gerente general y un auditor.
El gerente de ese centro médico será el farmacéutico Alejandro Esquivel Gerli, quien hasta setiembre era miembro de la junta directiva del Instituto Nacional de Seguros (INS).
Esquivel presentó su dimisión al cargo el 14 de setiembre alegando que razones personales le impedían “continuar sirviendo al país en esta posición”.
Su salida no se hizo efectiva hasta el 4 de octubre, según consta en el acta del Consejo de Gobierno del 27 de setiembre.
Entretanto, el 16 de setiembre fue nombrado por la junta directiva del Hospital del Trauma S.A, como gerente general.
El funcionario devengará un salario mensual de ¢4,1 millones, precisó el presidente ejecutivo del INS, Guillermo Constenla.
El jerarca del ente asegurador manifestó que tanto el nombramiento del gerente como del auditor responden a un requerimiento que hizo la Superintendencia General de Seguros (Sugese).
Manifestó que la Superintendencia les solicitó registrar la sociedad Hospital del Trauma como parte del Grupo Financiero INS.
Para ese registro se requería el nombramiento de ambos funcionarios, con lo cual se inicia la fase preoperativa del Hospital, manifestó Constenla.
Especificó que el gerente general tendrá a su cargo la terminación del proyecto, su puesta en marcha y la operación de ese, conjuntamente con los respectivos equipos de trabajo.
“Asimismo –agregó–, instrumentará la estructura organizativa, financiera, contable e informática necesarias para que haya niveles de eficacia y productividad”.
La junta directiva del Hospital del Trauma, S.A., también acordó que durante la fase preoperativa el centro contará con un ingeniero de sistemas, administrador financiero contable, administrador de talento humano, asistente administrativo y auxiliar administrativo.
Esa junta la componen Guillermo Constenla, Eugenia Chaves, Alberto Raven, Moisés Valituti y Francisco Soto.
Este año, el Hospital contó con un presupuesto de ¢196 millones y para el 2012 serán ¢300 millones.