La bacteria Clostridium difficile , que infectó a ocho pacientes en el Hospital San Juan de Dios, no es de una cepa tan agresiva como la que afectó a dicho centro médico entre mayo y agosto del 2009 y causó 17 muertes.
La coordinadora de la Unidad de Prevención y Control de Infecciones Intrahospitalarias del San Juan, Karla Carvajal, aseguró ayer que la llamada ‘superbacteria’ no está en el hospital desde el 2009.
Ese año, la cepa NAP1 fue una de las cinco variantes de la bacteria que afectó a los pacientes. Esta cepa es conocida como la “superbacteria”, porque produce gran daño a la salud y su letalidad es mayor.
El San Juan envía muestras a laboratorios de la Universidad de Costa Rica (UCR), donde han descartado la presencia de NAP1. Carvajal no aclaró cuál es la cepa que actualmente está infectando a los pacientes.
El hospital mantiene el protocolo preventivo para evitar la propagación. Esta semana calculan que aparecerán tres nuevos casos.
La alerta preventiva incluye el aislamiento de los infectados y medidas para reforzar la higiene. Además, se tiene restringido el uso de antibióticos de riesgo y se desinfectó el área donde se dio el contagio.
El hospital San Juan de Dios dijo que la restricción de visitas es solo para los pacientes aislados.
Los enfermos. Los ocho pacientes infectados permanecen separados del resto en una sala especial.
De ellos, cinco fueron infectados en una sala de Medicina Interna, dos en sala de quemados, y uno estaba internado en Urología.
La edad media de los pacientes es de 56 años, tres son mayores de 70 años, dos son mujeres y seis son hombres.
Todos tienen, al menos, tres de las siguientes condiciones: quemaduras, diabetes, hipertensión, enfermedades respiratorias o alguna cirugía ortopédica.
Carvajal dijo que los pacientes están estables, pero que los más graves son los quemados.
“Estos pacientes (quemados) son los que están más graves, pues sus quemaduras los hacen perder agua y electrolitos, y al tener diarrea causada por la bacteria pierden aún más agua y la situación se hace más delicada. Sin embargo, están estables”, dijo Carvajal.