Las aguas del río Tempisque, uno de los más importantes y grandes del Pacífico norte de nuestro país, están siendo contaminadas con materia fecal proveniente de varios afluentes de su cuenca.
Por ese motivo, el agua del Tempisque no puede usarse, en este momento, para su potabilización –para uso humano– , así como tampoco para actividades agrícolas, al menos en varios puntos de la cuenca.
La advertencia de la situación de ese río guanacasteco consta en un reciente estudio de calidad del agua en Guanacaste realizado por el Laboratorio Nacional de Aguas, adscrito al Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados (AyA).
El laboratorio tomó muestras de agua en 16 puntos a lo largo de toda la cuenta del Tempisque.
Aunque los ríos Tempisquito, Cañas y Liberia son los que más contaminación llevan al Tempisque, es el afluente liberiano el que mayor problemas presenta.
Por ejemplo, en el barrio Capulín, ubicado muy cerca del centro de Liberia, no está recomendada la potabilización del agua. En otras zonas también están vedados la natación, navegación y paisajismo, pues el nivel de coliformes detectado supera el mínimo permitido.
“Prácticamente, a lo largo de toda la cuenca, no es recomendable el uso de sus aguas para desarrollar actividades como el cultivo de almeja y camarón”, según consigna el informe.
En cuanto al uso del Tempisque para labores de riego, el laboratorio indica que esa “es una actividad que no debe realizarse en la parte media de la cuenca”. En ese punto hay zonas muy pobladas, como Filadelfia de Carrillo.