El tomógrafo del Hospital Calderón Guardia que da problemas desde febrero y mantiene angustiados a decenas de pacientes, podría volver a funcionar normalmente este jueves o viernes, promete el subdirector médico de ese centro de salud, Marco Vinicio Umaña Ramírez.
La falta de un repuesto que tenía que traerse del exterior se suma a la lista de problemas en el servicio de Radiología de ese hospital, denunciados por enfermos que esperan desde hace meses estudios radiológicos.
En un audio enviado por medio de la oficina de prensa de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), Umaña afirmó que el aparato entraría a funcionar esta misma semana, entre jueves o viernes. Este equipo realiza cerca de 1.250 estudios semanales.
El hospital también promete para finales de mayo tener dos tomógrafos trabajando, y uno más en octubre.
Según reconoció Umaña, días atrás, en entrevista con La Nación, el uso excesivo de los tomógrafos en ese centro, debido a un incremento en la demanda, provocó el desgaste de estos equipos y que uno de ellos saliera de operación en febrero al sobrepasar su capacidad de uso.
Desde entonces, los pacientes han pegado el grito al cielo, principalmente en redes sociales, porque llegan a citas programadas y se encuentran con el aparato fuera de operación.
El Calderón Guardia ha tenido que recurrir al apoyo de otros hospitales de la red de servicios de la CCSS; entre ellos, el México, el Nacional de Geriatría y el Max Peralta, en Cartago.
“Todos los exámenes se están priorizando de acuerdo a las necesidades de los pacientes. Quienes están en estado crítico son atendidos en un equipo del hospital.
“Además, el México nos apoya con casos hospitalizados y de emergencias, el Hospital Maximiliano Peralta realiza exámenes los fines de semana a pacientes a quienes se les han suspendido estudios y, recientemente, el Raúl Blanco Cervantes nos apoya con algunas horas para hacer realizar más estudios de este tipo”, explicó el médico.
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Los procedimientos que realizan los tomógrafos permiten el diagnóstico por imágenes de diferentes órganos internos, y son determinantes para definir tratamientos en enfermedades como el cáncer.
En promedio, ese hospital realiza 800 estudios semanales; la cantidad ha venido creciendo en número y en complejidad, dijo Umaña.
La situación de los tomógrafos del Hospital Calderón Guardia se suma a una crisis itinerante en radiología, pues en años recientes otros centros de la Caja han salido a escena con largas listas de espera y pacientes angustiados.
En el 2016, la historia de las crisis recurrentes de TAC tuvo como escenarios los hospitales México, San Juan de Dios y San Rafael de Alajuela, que obligó a la CCSS a montar un plan de sustitución de aparatos.
En enero del 2022, la institución empezó a sustituir los tomógrafos viejos en los hospitales México, San Juan de Dios y Calderón Guardia. Solo en cinco equipos la inversión fue de $14,8 millones, informó la institución hace un año.
La pretensión era instalar dos tomógrafos por hospital para eliminar el riesgo de que los centros se quedaran sin TAC si uno salía de operación, por ejemplo, por mantenimiento.