Los equipos de tomografía (tac), angiografía y autoclave no sufrieron ningún daño tras la inundación del Hospital Nacional de Niños, debido a las lluvias que cayeron sobre la capital la tarde del sábado.
Los aparatos ya empezaron a funcionar con normalidad, confirmó la directora médica de ese centro de salud, Olga Arguedas, tras consulta de este diario.
"Acaban de avisarme que concluyó el periodo de revisiones. La autoclave está operando, el tac comenzó ayer (martes), y hace unas horas tenemos el angiógrafo listo para operar. Podemos decir que no tenemos daño irreversible en ninguno de esos equipos", sostuvo Arguedas.
La paralización de estos servicios durante lunes y martes obligará al hospital a reprogramar las citas para 40 pacientes pendientes de tac y otros 8 que esperan estudios en angiografía, informó la directora.
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Los tres equipos, valorados en más de $3 millones, se mojaron con las aguas que anegaron las áreas de Emergencias, Radiología, Ortopedia y Nutrición.
Por esta razón, desde el domingo se paralizó el funcionamiento de los aparatos, para esperar a que se secaran y revisar con detalle si habían sufrido algún daño permanente, lo cual se descartó según comunicó Arguedas.
Solo el tac realiza un promedio de 20 estudios diarios y en el angiógrafo se programan dos pacientes al día para procedimientos coronarios.
Las autoridades del hospital entraron en conversaciones con instituciones como la Municipalidad de San José y Acueductos y Alcantarillados pues no existe garantía de que una nueva inundación vuelva a afectar a este centro de salud.
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Bajo sus instalaciones discurre entubada una acequia, además de tubería sanitaria. La capacidad de ambos alcantarillados (pluvial y sanitario), se ha vuelto insuficiente ante los grandes volúmenes de agua que han caído en los últimos días.