La ministra de Hacienda, Rocío Aguilar, conversará este jueves con los directivos de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) sobre la situación fiscal del país y las repercusiones que esto pueda tener en los servicios de salud.
El presidente ejecutivo de la CCSS, Fernando Llorca Castro, confirmó esa información y dijo que la audiencia fue solicitada por Aguilar.
"Será recibida en sesión ordinaria de Junta Directiva", dijo Llorca.
Ante consulta de La Nación, Aguilar evitó referirse a los temas puntuales que tocará ante el máximo órgano de decisión de la CCSS.
"Por respeto a los señores directivos , no considera prudente referirse a los temas a tratar antes de dicha reunión", comunicó por medio de su oficina de prensa.
La ministra Aguilar ha acudido en varias oportunidades al Congreso, donde le ha tocado explicar la solución propuesta a la crisis fiscal del país.
Asegura que para mantener una situación financiera sana se necesita combinar medidas que contemplen el aumento en los ingresos, la reforma en cuanto al gasto público y una efectiva gobernanza fiscal.
LEA MÁS: Economía tica pasa su momento más difícil desde la crisis del 2008
Según publicó este lunes La Nación, la economía nacional afronta su momento más difícil en la última década.
“Después de la crisis del 2008 este es el momento más difícil sin la menor duda. La crisis del 2008 no nos afectó porque no nos habíamos contaminado en el sentido de que los fondos de inversión costarricenses, las operadoras de pensiones no tenían inversiones internacionales en productos basura, como le pasó a muchas sociedades (…) a Costa Rica dichosamente no llegó eso”, comentó Bernardo Alfaro, superintendente general de Entidades Financieras.
Actualmente, el déficit fiscal es del 6,2% del Producto Interno Bruto (PIB).
De acuerdo con estimaciones del Banco Central, el exceso de gastos totales sobre ingresos totales del Gobierno Central (déficit financiero) alcanzará el 7,9% en el 2019 (cerca de ¢2,9 billones).
Este déficit se financia con préstamos y estos préstamos se acumulan y por ello el monto de la deuda del Gobierno Central crece.
Esta llegaría a representar un 49,2% de los ingresos que el país produce en un año, en el 2017, a un 53,6%, en el 2018, y un 59% en el 2019. Es como para una familia deber la mitad de los ingresos que puede generar.
La Caja maneja un presupuesto anual cercano a los ¢4 billones anuales para responder a la demanda en salud y pensiones de toda la población nacional.
Esta institución enfrentó una crisis financiera a principios de la década, que la obligó a contraer inversiones en infraestructura y a contener el crecimiento en salarios con el fin de no afectar los servicios de atención directa a las personas.