Hospitales persiguen ahorro y atención más cercana con visitas a casas de enfermos

Día de hospitalización cuesta $1.000, visita domiciliar, $100; para 2021 habría más camas hospitalarias fuera que dentro de centros de salud

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“Que la oportunidad que yo tuve la tengan otros”, mencionó Aarón Angulo Porras, de 40 años, vecino de San Pablo de León Cortés.

Este mecánico de oficio contó su historia la mañana de este miércoles. La puso como ejemplo de las incontables ventajas que para él y su familia ha tenido el servicio domiciliar que brinda el Hospital Max Peralta, en Cartago.

Angulo está paralizado del cuello hacia abajo y usa silla de ruedas debido a una enfermedad poco común: el síndrome de Guillian Barré. Alrededor de 200 personas al año la desarrollan en Costa Rica.

Durante un año completo, estuvo recibiendo una visita mensual de enfermeras, médicos y terapeutas de ese hospital, que le han permitido recuperarse significativamente sin necesidad de estar internado.

Su esposa, Judith Quesada, con quien lleva casado 11 años, explicó que una de las cosas más importantes de todo este proceso es proteger a Aarón de las infecciones que abundan en los hospitales.

Con este servicio no solo se beneficia al enfermo, sino también se ahorran costos a la CCSS. En promedio, un día de hospitalización le cuesta a la entidad $1.000 por paciente, sin que se trata de unidades especializadas, como la de Cuidado Intensivo.

La atención domiciliaria baja esos costos a $100 por enfermo, en promedio, y con mejores resultados pues la persona no sufre el desarraigo de su familia y comunidad, y tiene atención más personalizada, informó el gerente médico, Mario Ruiz Cubillo.

Por esas razones, la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) pretende ampliar a todo el país la cobertura de servicios similares a los que recibe la familia de Aarón Angulo, en un plazo de dos años.

Actualmente, entre los 29 hospitales de la Caja hay 5.525 camas de internamiento.

La pretensión institucional es multiplicar varias veces ese número afuera, en las casas de los enfermos, para los próximos dos años, confirmó el gerente médico, Mario Ruiz Cubillo.

Al 2021, todos los 29 hospitales de la institución deberían tener un hospital de día, donde los enfermos y sus familias acudan por atención más especializada que la que se da en una consulta externa, como para la curación de heridas, suministro de antibióticos o terapias específicas.

También, se pretende aumentar la cantidad de consultas a domicilio, como las que recibe Angulo en San Pablo de León Cortés. Solo el año pasado, la CCSS dio 118.615, casi el doble de las que se dieron en el 2015.

En lo que va del 2019, se han dado 97.349 consultas de este tipo; 27.815 de ellas (alrededor de un 30%), son para pacientes en estado terminal.

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Hasta 10 años en hospital

Una de las acciones inmediatas que anunció Ruiz es la conformación de 14 equipos de atención geriátrica que se movilizarán por todo el país.

La directora médica del Max Peralta, Krissia Díaz, explicó que ahí tienen una Unidad de Terapia Intensiva a domicilio, y que pronto inaugurarán el servicio de hospital de día.

El hospital cartaginés brinda atención en la casa en especialidades como Geriatría; también se suministran antibióticos y hay un programa de ventilación domiciliar.

“El hospital se desplaza a las casas de los pacientes. La reducción de las complicaciones asociadas a los internamientos y la mejora en la evolución de los pacientes son parte de los beneficios. Los reingresos por complicaciones se han reducido sustancialmente”, explicó la médica.

Ese hospital se vio en la necesidad de evaluar qué se hacía con los enfermos de larga estancia. Tuvieron uno que prácticamente vivió ahí durante diez años porque necesitaba ventilación con equipos hospitalarios para sobrevivir.

Según contó el jefe de Cuidado Intensivo en el Max Peralta, Carl Fabián Macaya, la gran pregunta que se plantearon fue cómo hacer para enviar pacientes al hogar evitándoles complicaciones.

El centro de salud se ha organizado de tal forma que ha provisto de equipos como ventiladores mecánicos a las familias de varios enfermos, y se ha creado una cultura de servicio domiciliar entre el personal, que hoy les permite pensar en ampliar ese tipo de atención.

El desarrollo de este ambicioso programa implicará el entrenamiento no solo del personal de salud sino de las familias y las comunidades donde viven los enfermos.

La aspiración es no solo extenderlo a nivel hospitalario, sino también lograr que Ebáis y Áreas de Salud puedan ampliar la atención a domicilio.

Al mismo tiempo, se reforzará este tipo de atención en más especialidades médicas y a diferentes grupos de edad.