Autoridades del Hospital Calderón Guardia aseguraron que trabajan las 24 horas del día para finalizar las obras que permitirían reabrir, al final de este mes, la maternidad y el servicio de Neonatología. Estos servicios fueron cerrados en diciembre tras detectar la contaminación con una bacteria.
La gerenta médica de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), María Eugenia Villalta Bonilla, confirmó en un comunicado de prensa que la empresa contratada recibió la orden para trabajar todo el día, luego de que el Ministerio de Salud aprobó el plan de mejoras presentado la semana anterior.
Esta institución invertirá alrededor de ¢100 millones en cambio de puertas y ventanas, pisos y techos internos –entre otros trabajos–, con el fin de elevar el nivel de bioseguridad de estos servicios y disminuir los riesgos de contaminación por agentes causantes de enfermedad, como virus y bacterias.
Los dineros que financiarán estos trabajos provienen de una modificación presupuestaria aprobada por la Gerencia Médica.
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Aunque el Ministerio de Salud dio seis meses para cumplir con el plan de mejoras, el hospital procura tenerlos listos al finalizar enero.
De acuerdo con reportes de ese centro médico, no se ha detectado nuevamente la presencia de la bacteria Serratia liquefaciens. Su aparición coincidió con el fallecimiento de seis bebés prematuros, en el servicio de Neonatología, a comienzos de diciembre.
La maternidad del Calderón Guardia es la segunda más grande del país. Cada año, atiende unos 5.700 partos; un 30% son de alto riesgo.
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Estos partos se están redistribuyendo en los hospitales de las Mujeres, San Juan de Dios y México. Las embarazadas de bajo riesgo son referidas al Centro de Atención Integral en Salud de Desamparados (CAIS) de Desamparados.
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Aunque la Serratia no es de las bacterias más frecuentes de encontrar en los hospitales –el Calderón la detectó por primera vez en diciembre–, es capaz de producir infecciones en la sangre, pulmones y vías urinarias.