EscucharA pesar de que las autoridades registran una baja del 33% en la incidencia de los casos de cáncer de cérvix, cada dos días una mujer fallece a causa de esta enfermedad y cada 10 horas se diagnostica un nuevo caso, según los datos de la Caja Costarricense de Seguro Social.
:quality(70)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/gruponacion/43IBVFGNJRGWFJEXZ4FP2WMZBU.jpg)
La mayoría de las personas se infectan con el vph poco después del inicio de la actividad sexual y la mayoría de las infecciones, se resuelven espontáneamente. (Archivo. )
La institución informó que este tipo de cáncer es el tercero con mayor impacto en las mujeres, dado que 13 de cada 100 mujeres con cáncer tienen de cérvix. Mientras tanto, 19 tienen de mama y 21 de piel.
El de cérvix también es el tercero en mortalidad (7 de cada 100 mueren por cérvix), igual que de colon, después del de estómago (13) y mama (15).
En el 2012 hubo 816 casos de cáncer de cérvix, lo que representa una tasa de 43 por cada 100.000 mujeres, según el Ministerio de Salud. En el año 2000 la incidencia era de 50,5 por cada 100.000.
Según los datos de Salud, en el 2012 hubo un total de 137 decesos por esta enfermedad, la cual es la tasa de mortalidad más baja de las Américas, basándose en información de la Organización Panamericana de la Salud.
El 26% de las muertes ocurrió en mujeres menores de 50 años, 48% entre los 50 y 75 años, y el otro 26% en mujeres mayores de 75 años.
El cáncer de cérvix es más común en mujeres entre los 45 y 70 años. Eso no quiere decir que no se presente en mujeres más jóvenes, ya que todo depende de los factores de riesgo como el inicio temprano de relaciones sexuales sin protección, las relaciones sexuales con diferentes parejas y los antecedentes familiares entre otros, informó la CCSS.
Prevención. El cáncer de cérvix está relacionado con el virus de papiloma humano (vph) transmitido por contacto sexual.
Algunas medidas para disminuir el riesgo de contraer cáncer de cuello uterino son no fumar y usar condones durante las relaciones sexuales.
Según la Caja, las mujeres fumadoras tienen un riesgo dos veces mayor de padecer de cáncer del cuello uterino que las mujeres no fumadoras.
Además destacaron la importancia del examen Papanicolau para detectar lesiones precancerosas en un período entre los 7 y 10 años después de la infección del virus.
La Caja informó que, por medio del Proyecto de Fortalecimiento de la atención Integral del Cáncer en la red institucional, ha invertido más de ¢185 millones en equipos especiales de cirugía, detección y tratamiento de esta enfermedad.
:quality(70)/s3.amazonaws.com/arc-authors/gruponacion/ead078ac-5948-45c3-beb0-0dc5999d8ad7.jpg)