El TSE inició ayer el conteo definitivo de los votos para diputados que determinarán el tamaño que tendrán los partidos en la Asamblea Legislativa, incluidos los que todavía pelean por la Presidencia de la República.
Los dos casos con mayor posibilidad de cambiar involucran tanto a Liberación Nacional (PLN) como a Acción Ciudadana (PAC), las agrupaciones que van a la segunda ronda el 6 de abril.
La curul más disputada es la quinta de Limón, de acuerdo con un análisis elaborado por La Nación, con base en los resultados preliminares que suministró el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE).
En la provincia del Caribe, el PAC gana la última plaza con 11.590 votos, pero el Movimiento Libertario se sitúa a diez votos, con 11.580.
La moneda gira entre Rolando Ballestero, primero en la papeleta del PAC, y Carmen Quesada, primera del Movimiento Libertario.
“Estoy seguro de que, después de que se verifiquen las 512 mesas (que faltan ) de Limón, el margen va a estar a mi favor”, dijo Ballestero.
Todavía queda por contar el 25% de las mesas limonenses, pues el 2 de febrero se escrutó preliminarmente el 75% de las juntas.
La otra plaza en la cuerda floja es la número 11 de Alajuela, la cual se disputan Silvia Sánchez, cuarta candidata del PLN, y Víctor Solís, primero del Partido Accesibilidad Sin Exclusión (PASE).
“Desde un principio hemos sido optimistas. Estamos esperando los resultados del TSE”, expresó Solís.
En el resultado preliminar, Liberación ganaba esta última curul gracias a un residuo de solo 260 votos. El PASE está a 1.800 votos de alcanzar el subcociente y si lo consigue con el conteo total, entraría a competir y desplazaría al PLN.
En Alajuela, todavía resta contar el 18,5% de las mesas.
Tras el escrutinio del 2 de febrero, Liberación tenía 18 diputados, el PAC 14, el Frente Amplio 9, la Unidad Social Cristiana (PUSC) 8, el Libertario 3, y Renovación Costarricense 2; al tiempo que Restauración Nacional, el PASE y la Acción Democrática Cristiana, uno.
Del conteo depende que el PLN y el PAC conserven sus cifras o bajen a 17 y 13, respectivamente.
Elección de diputados. Para asignar las diputaciones, primero se divide el total de votos válidos emitidos en cada provincia entre las curules disponibles. A ese resultado se le denomina cociente.
Una vez definido el cociente, se reparten los puestos entre la cantidad de cocientes que cada partido haya obtenido.
Si aún quedan puestos, se distribuyen de mayor a menor entre los residuos de votos de los partidos que obtuvieron cocientes y los que alcanzaron el subcociente (mitad del cociente).
En Puntarenas, el libertario Carlos Mora está a 1.000 votos del subcociente. Si lo hiciera, podría pelear el cargo al liberacionista Olivier Jiménez.
En Puntarenas, quedan por escrutarse un 21,2% de mesas.
Para Rolando González, gerente de campaña del PLN, ni en Alajuela ni Puntarenas es posible que otras agrupaciones los sobrepasen.
“No hay posibilidad de que los resultados cambien porque hemos hecho proyecciones. Estadísticamente no es posible que haya un crecimiento tan grande del PASE o del Libertario”, manifestó.
Revisión parcial. A diferencia de los votos para presidente, el conteo de los sufragios para el Congreso no se realizará a nivel nacional.
Según el asesor legal del TSE, Gustavo Román, solo se revisarán papeletas en cuatro casos: las que el sistema de transmisión de datos no contabilizó el 2 de febrero; las que se contaron sin la presencia de dos miembros de diferentes partidos; sobre las que existen demandas de nulidad; o en las que no se utilizó el padrón registro.
“Se espera un poco más de contención en este proceso porque hay algunas curules en disputa por muy pocos votos, de modo que habrá más interés de los partidos políticos”, adujo Román, quien no tiene una fecha estimada para el fin del escrutinio.