El gobierno habilitará 994 nuevos cupos en cuatro centros penitenciarios, en los próximos cuatro meses, para ayudar a reducir el hacinamiento de privados de libertad en las celdas del Organismo de Investigación Judicial (OIJ).
Así lo anunciaron este viernes el presidente Luis Guillermo Solís y el ministro de Justicia, Marco Feoli, luego de reunirse con el jerarca del Poder Judicial, el magistrado Carlos Chinchilla, y el director del OIJ, Wálter Espinoza.
De los nuevos espacios, 640 estarán en la nueva cárcel de Pococí, la cual estará en funcionamiento a partir del mes de mayo, dijo Feoli.
“Ya la construcción está finalizada, lo que pasa es que aún hay algunos atrasos en agua y electricidad”, indicó Feoli.
Otros 250 espacios estarán disponibles en la Unidad de Atención Institucional (UAI) Reinaldo Villalobos, contiguo al centro penitenciario La Reforma, así como en la UAI Pablo Presbere, en Pérez Zeledón.
LEA MÁS: Saturación de celdas judiciales desata enojo del director del OIJ
Los 104 cupos restantes serán habilitados con la remodelación, en los próximos dos meses, de uno de los ámbitos ya existentes de La Reforma.
Los jerarcas de ambos poderes, Ejecutivo y Judicial, también acordaron reducir el tiempo que se trasladan los indiciados de las celdas del OIJ a los centros penitenciarios.
"El día de ayer (jueves) se redujo en más de un 50%, más o menos, aún hay 80 personas en celdas del OIJ que tenían más de cinco días de estar ahí", señaló el ministro.
Feoli agregó que, el próximo 15 de marzo, durante una audiencia ante la Sala Constitucional, pedirán a los magistrados que se le permita al Ministerio de Justicia y Paz "administrar el hacinamiento".
"Hay una serie de órdenes de los jueces de Ejecución de la Pena que nos impiden distribuir a las personas internamente y, cuando esto pasa, que es en casi todos los centros penales del país, a nosotros se nos dificulta muchísimo administrar el hacinamiento", explicó.
Asimismo, se acordó echar mano de la tecnología, efectuando audiencias judiciales de manera virtual, para evitar que algunos privados de libertad deban ser trasladados a un estrado judicial y, por consiguiente, que requieran campos en celdas del OIJ.
Jerarcas de OIJ y Justicia se sentaron a dialogar
La cita fue pautada a raíz de la denuncia pública que hizo el director del OIJ, Wálter Espinoza, luego que un hombre fuera asesinado en febrero pasado en las celdas judiciales de Limón.
En esa ocasión, Espinoza aseguró que el problema radicaba en que los jueces imponen penas de prisión preventiva, pero los sospechosos permanecen recluidos en los circuitos judiciales, por la falta de espacio en la cárcel para indiciados de San Sebastián.
El jerarca también reclamó que el Ministerio de Justicia no acata las decisiones de los jueces y que el problema se ha hecho insostenible en los últimos 12 meses.
Sin embargo, tras la reunión en Zapote, Espinoza aseguró que el problema de la sobrepoblación en las cárceles del Poder Judicial responde a "una manifestación externa de un problema delincuencial que está viviendo el país".
LEA MÁS: Director de OIJ rechaza reunirse con ministro de Justicia para hablar de hacinamiento
"Evidentemente, conforme ha aumentado la delincuencia y las fuerzas de Policía han incrementado su mejoría en acciones de naturaleza represiva, han aumentado los casos, los detenidos y se han dictado más prisiones preventivas", indicó.
Espinoza reconoció que el OIJ no ha estado preparado para recibir más personas en sus celdas, "las cuales son de carácter transitorio y que no permiten que las personas tengan estancias prolongadas".
"El OIJ está dispuesto a cooperar en todas las acciones que se han planteado, sobre todo en el tema tecnológico, en el tema de cercanía con el Ministerio de Justicia, en mejorar los traslados y de alguna manera, también tenemos el apoyo de la Corte en cuanto a mejoras de la infraestructura y también de personal", indicó el funcionario, al hacer un balance del encuentro.