Dos directores suspendidos del Banco de Costa Rica (BCR) dijeron al Ministerio Público y confirmaron a La Nación que Casa Presidencial intervino en al menos tres decisiones que competían exclusivamente a la junta directiva.
Se trata de Francisco Molina y Mónica Segnini, a quienes el Consejo de Gobierno les suspendió el pasado 3 de octubre como medidas cautelar, mientras son investigados, luego de un supuesto mal manejo del Gobierno Corporativo del BCR.
Ambos declararon a la Fiscalía General en calidad de testigos en la investigación sobre el cemento chino, por la cual están detenidos el importador del cemento Sinocem, Juan Carlos Bolaños, y Mario Barrenechea, gerente suspendido del BCR.
El medio digital crhoy.com publicó este viernes extractos de las declaraciones de los directores suspendidos, quienes confirmaron a la Fiscalía posibles presiones de Casa Presidencial.
Segnini identificó a la también directora suspendida, Paola Mora, como una persona que decía conocer las posiciones de Casa Presidencial con respecto a ciertos temas internos del BCR y quien tenía la costumbre de señalar si 'tal tema' tenía o no el respaldo de Zapote.
De acuerdo con ambos testimonios, Casa Presidencial llamó a varios directivos para retrasar la suspensión de Paola Mora del cargo de presidenta de la junta directiva por 'pérdida de confianza', tras conocerse el acercamiento de ella con Juan Carlos Bolaños.
Según Segnini, a su vez, el ministro de la Presidencia, Sergio Alfaro, la llamó para pedirle retrasar la suspensión, pero que en caso de que así fuera, le diera su voto al director Gustavo Arias por ser más 'neutral'.
"Yo comprobé (las presiones), al menos en el caso del proceso que teníamos una moción para destituir a Paola, Mora, fueron un par de días tan intensos, entre la amenaza de bomba (el día que estaba previsto la destitución) y de llamadas, una de esas fue Sergio Alfaro y resulta que las llamadas eran para detener el proceso", reconoció Segnini.
En julio, al adelantar su renuncia Mora, los directivos nombraron a Segnini como presidenta de la junta directiva.
"Para la elección de la presidenta me llaman de Casa Presidencial, no querían que fuera Mónica Segnini, esa fue la llamada que yo tuve, yo les dije que esa había sido la decisión", dijo Francisco Molina a La Nación.
"No querían que fuera Mónica, hubiesen querido que fuera Paola, pero ellos hablaron la posibilidad de que fuera Gustavo Arias... Me dijeron que por mejorar el ambiente de junta", continuó el director.
En otra ocasión, hacia finales de 2014 y previo a la designación del gerente general, Segnini confirmó que su compañero Ronald Solís le propuso a Mario Barrenechea como el candidato que tenía el respaldo de Casa Presidencial.
Solís también fue suspendido en octubre, sin embargo, presentó su renuncia días después.
"Ronald nos decía "este es el gerente que tiene el apoyo de Casa Presidencial", señaló la directora.
Por su parte, Molina dijo que Barrenechea 'fue una recomendación que se nos dijo venía de Casa Presidencial". Otra vez, no quiso decir quién lo mencionó.
En la comparecencia en la Asamblea Legislativa, en agosto del año pasado, Ronald Solís dijo que la idea (de nombrar a Barrenechea) fue puesta sobre la mesa durante una reunión en la Presidencia de la República en la que estuvo presente Mariano Figueres, director de la Dirección de Inteligencia y Seguridad (DIS).
Segnini y Molina también confirmaron que Paola Mora fue quien les presentó el plan de reactivación económica que conllevaba un acuerdo de financiar la importación de cemento y varilla desde China.
Bajo la sombrilla de este plan, fue que el BCR prestó a Bolaños dinero para importar cemento.
Ambos dijeron que el documento no nació en la junta, sino que cuando fue presentado, Mora les dijo que ya había sido llevado a Casa Presidencial ante un planteamiento de Zapote sobre el documento.
Fueron Mora y Barrenechea quienes acudieron a Casa Presidencial a discutir el proyecto con Sergio Alfaro.
"La única comunicación de la Junta con Casa Presidencial era con Paola y con Mario, no existía un diálogo abierto con ellos", confirmó Segnini.
"Nos enterábamos después de reuniones en las que Paola iba en representación del banco de las que nunca nos enterábamos ni de antes ni después. Con ese tema del crédito del cemento, de la relación con Juan Carlos Bolaños, cuando se dio la contratación de Pedro Pablo Quirós. Fueron varias situaciones que ya se hicieron insostenibles", señaló la directora.
Segnini, además, aseguró que era la 'costumbre' de Mora decir que un tema cualquiera ya había sido discutido con Casa Presidencial.
"Cuando discutimos todo lo de Bicsa, todos los casos polémicos, todo el tema del fideicomiso de la carretera San José-San Ramón, el tema de la suspensión de Guillermo Quesada, que Casa Presidencial estaba enterada de eso y que teníamos todo el respaldo", confirmó Segnini.
"Ese era su costumbre, a veces ella llegaba tarde y decía que venía de Casa Presidencial".
El abogado de Mora, José Miguel Villalobos, aseguró que la directora nunca recibió presiones de Casa Presidencial y enfatizó que no era su obligación comunicarle a sus compañeros de sus reuniones en Casa Presidencial.
Además, negó que el plan de reactivación económica fuera una propuesta de su cliente, sino que solo asistió a una cita con Barrenechea y Sergio Alfaro para discutir el documento.
Este viernes, La Nación solicitó a Casa Presidencial una reacción del presidente Luis Guillermo Solís o de Sergio Alfaro sobre estos temas, sin embargo, se nos indicó que la respuesta estaba siendo tramitada.