La administración de la Asamblea Legislativa les debitará a los diputados la gasolina que gasten en giras con carros oficiales, de los 500 litros de combustible que le asigna a cada uno mensualmente.
Así lo acordó el Directorio del Congreso en un reglamento interno sobre el uso de los vehículos oficiales, aprobado el miércoles por la noche, enviado ayer a publicación en La Gaceta.
El mecanismo se alimentará de la información de los dispositivos de posicionamiento global que tiene cada automóvil, el cual permite calcular el kilometraje de los vehículos de la Asamblea, al final de cada gira.
La deducción de los litros que cada diputado demande se hará luego de que utilice el automóvil estatal. Ellos disponen de una tarjeta bancaria con la que pueden pagar el combustible mensualmente; 500 litros de diésel hoy equivalen a ¢225.000 y de gasolina súper a ¢280.000.
Según datos de la Unidad de Transportes de la Asamblea, cada uno de esos vehículos Nissan Pathfinder puede hacer 10 kilómetros por cada litro de combustible, aproximadamente.
De esa forma, si un diputado hace una gira de 1.000 kilómetros, se le descontarán 100 de los 500 litros asignados.
La medida surge del criterio jurídico de la Procuraduría General de la República que le respondió al Directorio legislativo que los parlamentarios deben cubrir el combustible de los vehículos oficiales usados para sus giras de fin de semana.
En el caso de los vehículos que se utilicen para actividades más institucionales, como las giras de las comisiones o alguna actividad protocolaria, como un traspaso de poderes, la administración proporcionará el combustible.
Karla Prendas, legislador< de Liberación Nacional (PLN) e integrante del Directorio, dijo que el método aprobado es “muy simple”.
El rebajo de la gasolina gastada por los diputados se realizará el día 20 de cada mes, según el gasto hecho.