En este Día del Padre, un grupo de hombres no podrá compartir el tiempocon sus hijos. Una denuncia ante el Juzgado de Familia por agresión hacia la madre de sus niños les impide toda visita a los menores, a pesar de que insisten en que la acusación es falsa.
Mediante marchas y tocando puertas en la Asamblea Legislativa, estos papás piden que haya una ley que permita que, tras la separación de la familia, el menor disfrute de sus dos progenitores.
Aseguran que quieren compartir la crianza, que no son agresores y que en los juzgados las leyes solo favorecen a las mujeres.
“Esto ha sido un calvario. Voy para dos años que no veo a mis hijos y me niegan todo tipo de contacto con ellos. Es falso que yo haya agredido a la madre de mis hijos.
”Lo que pasa es que la justicia pronta y cumplida no existe. La mamá hizo de todo para impedirme el régimen de visitas y considero que en un problema entre adultos; los niños no deberían verse afectados”, dijo Frank Schielzeth, padre de dos niños y vecino de Escazú.
La exdiputada libertaria Damaris Quintana propuso el proyecto de “Ley para el Abordaje de la Violencia Parental”, que busca una atención integral de las instituciones del Estado para que al niño no se le limite la capacidad de compartir tiempo con su otro progenitor.
El proyecto está de número 149 en la agenda legislativa y entidades como la Defensoría de los Habitantes, el Instituto Nacional de las Mujeres (Inamu) y el Colegio Profesional de Psicólogos consideran que la normativa actual es suficiente para que los hombres defiendan su derecho a las visitas.
“No se puede llamar desventaja a una tutela específica de protección. Hay medios de discusión, como las audiencias. Cuando un juez toma la decisión, tiene elementos para emitir el criterio”, dijo Alejandra Mora, presidenta del Inamu.
Diario. En Costa Rica hay 117 Juzgados de Familia y todos los días se reciben casos de este tipo, en los que la separación obliga a discutir quién asumirá la potestad de crianza sobre el menor, el régimen de visitas y la pensión alimentaria.
“Habrá casos en los cuales la mujer logra engañar al juez, pero son los menos. No es que hay una tendencia a favorecer a la mujer. El juez de Familia tiene que buscar la verdad real. Lo importante es verificar que el niño no se convierta en un objeto de conflicto entre la pareja”, dijo Ana Picado, jueza coordinadora del Tribunal de Familia.
Para la defensora de los Habitantes, Ofelia Taitelbaum, el proyecto de ley propuesto no responde a los intereses superiores del niño, aunque reconoció que se debe prestar atención a los padres que dicen que las acusaciones de violencia son manipuladas por la mujer.
“Un niño no puede estar cerca de un padre que agrede a su madre. Pero sabemos que se dan casos en los que la mujer miente y en estos hay que trabajar, con las leyes existentes, para que se busque la verdad del conflicto y el niño no sea el afectado”, indicó Taitelbaum.
Mientras tanto, estos padres lamentan que solo les queda el recuerdo de los juegos, las idas en carro a la escuela todas las mañanas y las actividades de fin de semana.
“Uno no se divorcia de los hijos. ¿Por qué tienen ellos que notar una diferencia tras un divorcio? Yo, por ejemplo, llevaba todos los días a mis chiquitas a la escuela. Es frustrante”, comentó Luis Amón, otro papá afectado por esta situación.
También la Junta Directiva del Colegio de Psicólogos resolvió que no hay necesidad de contar con una ley específica para estos efectos.
“Ya existen leyes que pueden ser herramientas para resolver estas situaciones. Más bien hay que sensibilizarpara evitar este tipo de conflictos tras la separación”, concluyó Viviana Umaña, fiscal de ese órgano colegiado.