Mala infraestructura vial, deficiente gestión de los gobiernos locales, bajo acceso a la educación superior, poca promoción del turismo y altos niveles de delincuencia son algunos de los factores que le impiden a Limón sacarle el máximo provecho a la nueva Terminal de Contenedores de Moín (TCM).
Esa es una de las conclusiones de un estudio elaborado por la consultora internacional Qbis-Consulting y la Academia de Centroamérica para APM Terminals, concesionario del proyecto por 33 años.
La región del Caribe, según el informe, urge la ampliación a cuatro carriles de la ruta 32, entre el cruce a Río Frío y Limón.
Además, dice que se deben intervenir 3.261 kilómetros de caminos, la mayoría de lastre y piedra.
“El tema de la infraestructura es completamente crítico, no ganamos nada teniendo un puerto de primer orden si no podemos sacar con agilidad los contenedores del puerto.
”Esto implica mejoras en carreteras y caminos vecinales que sirvan para el transporte de mercadería y también de turistas”, comentó Édgar Robles, uno de los economistas a cargo de la investigación.
El 26 de abril la Contraloría General de la República refrendó el contrato para la ampliación de la vía a Limón. Ahora están pendientes las etapas de diseño y construcción, que no deben superar los 42 meses.
Esta obra pretende solucionar la congestión vía a la provincia y atender el alza vehicular tras la apertura de la terminal portuaria en el 2018.
Según el Laboratorio Nacional de Materiales y Modelos Estructurales (Lanamme, de los 5.261 km que conforman la red vial nacional, 487 km están en Limón (9,2%).
Limón es, junto a Cartago y Heredia, la provincia con menor cantidad de kilómetros dentro la red vial nacional.
Competitividad. En diferentes ránquines de desarrollo, progreso social y competitividad Pococí, Limón, Guácimo, Matina, Talamanca y Siquirres aparecen en las peores posiciones.
Por ejemplo, en el índice de progreso social (IPS) 2015, presentado por el Centro Latinoamericano para la Competitividad y el Desarrollo Sostenible (CLACDS) del Incae, aparecen los seis cantones de Limón en las últimas 24 posiciones.
Limón, Matina y Talamanca están entre los seis últimos de ese mismo indicador.
El índice de progreso social toma en cuenta aspectos como acceso a la vivienda, servicios públicos y educación, entre otros.
Por el contrario, las mediciones relacionadas con delincuencia colocan a los cantones del Caribe en los primeros lugares.
El Observatorio de la Violencia reveló en 2014 que la tasa de homicidios en Limón fue de 23 casos por cada 100.000 habitantes, lo cual duplica la tasa de homicidios de San José y es cinco veces superior a la que presenta Cartago.
“La inseguridad ciudadana aleja al inversionista extranjero, hace que se invierta más en resguardar activos de las empresas y eso tiene costos en términos de empleo”, añadió Robles.
El 10,9% de la población en capacidad de trabajar está desempleada en Limón, según la última Encuesta Continua de Empleo. Se estima que la TCM creará 2.120 empleos directos e indirectos.
Educación. Cinco de los seis cantones de Limón están ubicados como los 21 cantones del país con peor acceso a la enseñanza superior, según el IPS 2015.
Julio Calvo, rector del Instituto Tecnológico de Costa Rica, señaló que para reducir este problema las universidades públicas deben invertir en el Caribe.
El Instituto ofrece en Limón, desde hace tres años, las ingenierías en computación y producción industrial. También imparte administración de empresas.
Calvo añadió que compraron un lote de 2,5 hectáreas en Cerro Mocho, Limón, con el objeto de construir unas instalaciones para 600 estudiantes.