A menos dos dos semanas de inaugurada, la llamada punta norte de la carretera a San Carlos se quedó sin señales de tránsito y captaluces u “ojos de gato” debido a la acción del hampa.
La denuncia la hizo en redes sociales la Asociación Pro Carretera Naranjo-Florencia, el martes de esta semana.
Patricia Romero, presidenta de esa organización, dijo que los delincuentes se han robado entre 20 y 30 captaluces, tanto de los que estaban en las barandas como los que se instalaron en el asfalto.
Este tipo de dispositivos, que reflejan la luz de los faros de los vehículos, son muy útiles en carreteras donde predomina la lluvia y la neblina, o donde no hay alumbrado público.
Según Romero, también se han llevado varias señales, pero sin precisar cuántas.
“Las pérdidas económicas son importantes, pero lo más preocupante es que el robo de una señal de tránsito o de estos captaluces pueden provocar un accidente”, declaró Romero.
Por esta razón, piden a los ciudadanos denunciar de inmediato si se observa a alguna persona cometiendo estos delitos.
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La punta norte fue inaugurada el 6 de octubre y comprende siete kilómetros que van desde el Liceo San Carlos, en Ciudad Quesada, hasta el distrito de Florencia.
Eventualmente conectaría con la nueva carretera a San Carlos, la cual comenzó a idearse hace 50 años y a construirse desde el 2005. No obstante, durante los últimos trece años han surgido dificultades financieras, ambientales y geológicas que han impedido concretar la construcción de esos 30 km.
La obra está detenida desde agosto, cuando el Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) decidió romper con la constructora Sánchez Carvajal, por problemas de ejecución y retrasos en el proyecto.