Los postes abatibles volverán al tramo montañoso de la carretera a Limón en los próximos meses.
El Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) compró 2.400 dispositivos que se instalarán en el trayecto de 37 kilómetros entre el peaje y el cruce hacia Río Frío.
Además se utilizará pintura termoplástica para demarcar según el diseño 2+1 implementado por la Dirección de Ingeniería de Tránsito.
Este consiste en alternar por dos kilómetros dos carriles en un sentido, a la vez que en el sentido contrario se deja solo uno, y luego se invierte esa dinámica varias veces a lo largo del recorrido.
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Los nuevos postes abatibles son similares en tamaño y forma a los colocados en el 2015. Contarán con adhesivos reflectantes en su parte superior, que permitirá a los usuarios guiarse de mejor forma en la carretera.
En el MOPT aseguraron que estas estructuras son de mejor calidad que los dispositivos anteriores.
De acuerdo con Alejandra Acosta, ingeniería del departamento de Ingeniería de Tránsito, un laboratorio estadounidense certificó que esto dispositivos pueden soportar hasta 200 golpes a una velocidad promedio de 96 km/h.
El costo de la demarcación y colocación de estas estructuras es de ¢177 millones y es financiado por el Consejo de Seguridad Vial (Cosevi).
La obra está a cargo de las empresas Horizontes de Vías y Señales C.A.S.A., Publivías S. A., Publiseñales de Costa Rica S. A., Servicios de Señalamiento Vial S. A. y Bela Consultores S. A.
Además de los 2.800 postes que se van a colocar, la empresa deberá aportar otros 480 postes para que la Administración sustituya aquellos que se pudieran dañar con el paso del tiempo.
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Los dispositivos son de unos 90 cm de altura y un diámetro de unos 23 cm, de color amarillo, resistentes al medio ambiente, a cambios extremos de temperatura y a los rayos ultravioleta, para que no pierdan significativamente su color ni su consistencia, detalló el MOPT en un comunicado.
En esta ocasión estos señalamientos se colocarán en todo el recorrido, incluso en los tramos donde solo hay un carril por sentido.
En el 2015, el Cosevi pagó ¢223 millones por la demarcación y la colocación de 2.000 dispositivos. La mayoría no resistieron ni dos años en la vía.
El cartel anterior establecía que los postes debían soportar hasta 200 impactos de vehículos de 5.000 libras (automotores de doble tracción) que viajen a una velocidad de 70 kilómetros por hora.