La Iglesia Católica de Costa Rica es socia del Grupo Empresarial Sama y su representante en esa compañía es el administrador de Servicios Pastorales, el sacerdote Guillermo Godínez Zúñiga.
Sama es un conjunto de empresas financieras y bursátiles que maneja las inversiones y el capital de la Iglesia Católica de Costa Rica.
Según documentos en poder de este diario, la Iglesia Católica de Costa Rica, a través de la Conferencia Episcopal de Costa Rica (Cecor), posee al menos un 20% del paquete accionario del Grupo Sama.
El sacerdote Godínez Zúñiga ocupa cargos en las juntas directivas de seis empresas ligadas a ese grupo financiero.
El religioso es secretario de la junta directiva de Grupo Consolidado Sama S. A.; es director vocal segundo de Sama Internacional (GS) S. A.; director vocal segundo de Sama Sociedad Fondos de Inversión S.A.; director vocal segundo de Sama Casa de Cambios GS S. A. y director vocal segundo de Inversiones Sama S. A.
En diciembre del 2003 se reportó que socios del Grupo Sama adquirieron las empresa Pipasa y As de Oros. Uno de los inversionistas en esa operación fue Sarita Trading S. A. , empresa panameña cuyo propietario era el entonces administrador de Servicios Pastorales, Jorge Torres.
La compra de las acciones de Pipasa se financió con recursos de Servicios Bursátiles Internacionales (SBI), firma representada en Costa Rica por el Grupo Sama.
El sacerdote Godínez Zúñiga es quien firmó una serie de cheques, girados desde cuentas de la Cecor, a la empresaria suiza Anna Moscarelli.
Esos cheques fueron parte de un préstamo por $3 millones que la suiza negoció con Jorge Torres, fallecido en junio pasado.
En relación a este caso, el sacerdote Godínez indicó que la firma que aparece en los cheques es un facsímil de su rúbrica, utilizado sin su consentimiento.