“Hace más de una semana que no tenemos ni una gota de agua en la ciudadela Rodrigo Facio, en Ipís de Goicoechea”, dijeron vecinos del lugar a La Nación el 9 de febrero de 1971 .
La zona, donde vivían más de 600 familias, tenía un problema de falta de agua que nunca había sido solucionado.
Es decir, la ciudadela se fundó sin agua en las cañerías, fenómeno que persistía en ese momento.
Los ciudadanos decían que habían agotado absolutamente todos los recursos y que las autoridades respectivas ponían oídos sordos a sus demandas, las cuales consideraban justas.
“Ni el más salvaje de los seres puede vivir sin agua”, decían.
“Vemos por otra parte que los organismos encargados de estos problemas pagan bastante propaganda anunciando la inauguración de cañerías en todas partes, mientras que un populoso sector que está a seis kilómetros de la ciudad, permanece en el olvido.
“Durante el invierno, la pasábamos regular. Bastaba con poner ollas y baldes bajo las canoas y obteníamos el agua siquiera para beber. Actualmente la crisis se agrava en todos los aspectos porque ni siquiera tenemos el consuelo de un aguacero”, alegaban los habitantes.
En otras noticias:
Conductor fallece en accidente en puente sobre el río Grande
Semidestrozado y con el cadáver del conductor adentro, salió a flote halado por una grúa un automóvil Volkswagen, color blanco, placa 10428, que cayó en una profunda poza bajo el puente sobre el río Grande, en la carretera de Atenas.
El rescate del vehículo, que estaba sumergido bajo seis metros de agua en una poza oscura, fue la culminación de 18 horas de esfuerzos realizados por un abigarrado contingente de cuerpos de rescate de la Cruz Roja.
Se apersonaron paramédicos de varias poblaciones, incluyendo patrullas de la capital, miembros de la comandancia de plaza de Alajuela dirigidos por el comandante Mayor Guillermo Calvo, guardias rurales, bomberos de Alajuela y Heredia, así como agentes de radiopatrullas.
Extremistas cometieron atentado contra cuatro policías españoles
Cuatro agentes de la policía española estaban en grave estado en un hospital de Barcelona, luego que extremistas de izquierda lanzaron un coctel molote dentro de su automóvil durante una manifestación anti-gubernamental, informaron fuentes policiales.
Las fuentes dijeron que el ataque ocurrió cuando 300 manifestantes se reunieron en una calle de Barcelona para corear lema anti-gubernamental y que el grupo atacante también apedreó algunos vehículos.
No se informó de detenciones luego de los hechos.