Con el regreso de niños y jóvenes a los centros educativos, también volverán a funcionar las sodas que manejan privados dentro de las escuelas y colegios.
La autorización de la apertura fue el resultado de una reunión que sostuvieron el viernes representantes de los ministerios de Educación Pública (MEP) y de Salud.
Leonardo Sánchez, director de Programas de Equidad del MEP, confirmó que Salud dio el aval, por lo que la próxima semana comenzarán a elaborar el protocolo.
Sánchez adelantó, sin embargo, que algunos de los alimentos que antes de la pandemia se vendían, no se ofrecerán pues su manipulación puede complicar el cumplimiento de medidas para evitar la propagación del virus SARS-CoV-2, que causa la covid-19.
De acuerdo con el funcionario, analizarán uno a uno los productos que se venden.
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“Parte de la elaboración del protocolo está en revisar lo que se vende en las sodas. La idea es que se vendan productos prácticos para evitar la aglomeración de los alumnos. Son productos muy prácticos, no que impliquen filas. Como los recreos van a ser escalonados, esto también va a permitir que no haya aglomeración”, explicó el funcionario.
Sánchez añadió que buscan estrategias para minimizar las posibilidades de contagio, una de ellas puede ser que los encargados de las sodas vayan a las aulas a vender los productos para evitar que los alumnos se aglomeren al pedir alimentos en el establecimiento.
Algo que está claro desde ahora es que se solicitará a los alumnos no compartir alimentos entre ellos.
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Rentabilidad
Aunque Salud autorice la apertura de las sodas escolares, esto no quiere decir que las mismas estarán abiertas desde las primeras semanas.
Sánchez explicó que, como son pocos los alumnos que van a regresar el 8 de febrero a la presencialidad, debido a la educación combinada entre clases presenciales y virtuales, para muchos dueños no será rentable abrir los locales.
Sin embargo, la conveniencia se determinará pasadas esas primeras semanas, cuando el director de cada centro educativo organice los grupos de acuerdo a la matrícula y los horarios. Además, se debe tener en cuenta cuántos estudiantes no acudirán presencialmente por decisión de sus padres.
Otra opción para los dueños es llegar a acuerdos con las Juntas de Educación para definir un monto de alquiler acorde a la situación.
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Sánchez explicó que hay solicitudes de centros educativos, principalmente en zonas alejadas, que por su situación geográfica han solicitado la apertura de los comedores.
“Estamos en este momento valorando, en casos particulares, abrir comedores para los días en que van los alumnos, a la mayoría se les va a entregar paquetes. También se está valorando dar una merienda. Eso es parte del protocolo que vamos a desarrollar”, añadió el funcionario.
El protocolo lo construye la Dirección de Programas de Equidad del MEP, el Ministerio de Salud y nutricionistas.