Roma. AFP. El Gobierno que encabeza el moderado líder de centroizquierda Enrico Letta obtuvo ayer plena confianza del Parlamento italiano, pero enfrenta numerosos desafíos a internos e internacionales frente a la grave crisis social y económica que atraviesa Italia.
La votación en el Senado confirmó el resultado obtenido el lunes en la Cámara de Diputados, con lo que Letta lidera el primer gobierno de coalición respaldado por la izquierda y la derecha de la historia republicana, tras dos meses de parálisis política.
En contra del gobierno presidido por Letta votaron el Movimiento 5 Estrellas, del cómico antisistema Beppe Grillo, tercera fuerza política italiana, e Izquierda, Ecología y Libertad. Por su parte, la Liga Norte, separatista , se abstuvo.
“Es el único gobierno posible para el país”, escribió Ugo Magri en un editorial publicado por el diario La Stampa al resumir el clima favorable con el que se recibió la designación del primer ministro italiano por parte de la prensa local. Letta es de 46 años, el más joven de Europa.
Este Ejecutivo obtuvo ayer la confianza de 233 senadores, 59 votos en contra y 18 se abstuvieron.
Frente a los retos que debe enfrentar, Letta reconoció ante los senadores que su Ejecutivo está suscitando “demasiadas expectativas” con respecto a las dificultades y la fragilidad del país.
Ambicioso programa. Letta ilustró el lunes, en un convincente discurso, las líneas de un ambicioso programa de gobierno , centrado en el crecimiento económico, para sacar de la parálisis a la tercera economía de la zona euro, en el que pidió a la Unión Europea (UE) ablandar su política de austeridad.
También prometió medidas para reactivar el empleo, sobre todo de jóvenes, y para suprimir el impuesto a la vivienda, tal como exige su aliado, el magnate Silvio Berlusconi, pero que necesitan financiación, otro reto difícil.
“Será una carrera llena de obstáculos”, comentó Dino Sole, del diario económico Il Sole 24Ore .
Además de los problemas económicos de Italia por la recesión, Letta debe encarar las divisiones políticas que marcaron la creación del primer gobierno de unidad.
“No hay alternativas, hay que estar juntos”, aseguró. Además, admitió ante los senadores que le hubiera gustado un resultado electoral claro , lo que no se dio y paralizó por dos meses la vida política.
En su discurso de investidura, Letta, vicesecretario del Partido Democrático, manifestó sus preocupaciones por la política de austeridad impuesta por la UE.
“Nuestro continente no puede estar unido solo por la moneda”, dijo Letta ante los senadores, e instó a los países miembros de la UE a compartir “un destino común”.