Londres. El autor de un ataque yihadista con un cuchillo en 2020 en Londres, abatido por la Policía, era conocido cuando estuvo en la cárcel por su radicalismo y por querer “matar a la reina”, según un informe hecho público este martes ante un Tribunal.
Desde el lunes, el Tribunal Superior de Londres celebra una vista en la investigación sobre el atentado perpetrado el 2 de febrero del 2020 por Sudesh Amman.
El atacante, quien llevaba un chaleco explosivo falso, apuñaló a dos personas en una calle comercial del distrito londinense de Streatham.
Una tercera persona resultó herida por los cristales rotos causados por los disparos de la Policía.
Amman, condenado por posesión y distribución de material yihadista a 40 meses de prisión, había salido de la cárcel menos de dos semanas antes del ataque, tras cumplir la mitad de su condena.
Los informes de la administración penitenciaria señalan que su comportamiento se había vuelto cada vez más violento durante su detención en la prisión de alta seguridad de Belmarsh.
Asimismo, se detalla que había gritado, entre otras cosas, “¡este lugar está lleno de no creyentes!” y “¡todos aquí se reunirán bajo la bandera negra!” del grupo Estado Islámico.
También habló de "creencias extremistas, incluido el deseo de matar a la reina, convertirse en un terrorista suicida y unirse al Estado Islámico".
Un funcionario de la Policía londinense, Luke Williams, dijo que “parecía orgulloso de ser el terrorista convicto más joven en Belmarsh y no parecía sentir ningún remordimiento”.
Sudesh Amman fue considerado tan peligroso tras su salida de la cárcel que estaba vigilado de cerca por policías armados, lo que llevó a su captura un minuto después de que comenzara el ataque.