Tegucigalpa
La Fiscalía de Honduras confirmó hoy que los restos humanos hallados el martes en el norte del país son los del periodista Aníbal Barrow, quien fue secuestrado el 24 de junio pasado en la ciudad de San Pedro Sula.
“Queremos confirmar el hallazgo y bajo el criterio de la prueba científica que he descrito que en un cien por ciento el Ministerio Público da a conocer que la persona encontrada se refiere al ciudadano Aníbal Barrow ” , dijo en rueda de prensa el director de fiscales, Roberto Ramírez.
Agregó que la aseveración la hace el Ministerio Público “ con el fundamento de tener concluidos los dictámenes forenses, morfológicos, radiológicos, métricos y además la pericia de la odontología forense ” .
Barrow, de 58 años, dirigía un programa en un canal de la televisión local, y además era ingeniero agrónomo y docente universitario.
El día de su secuestro, en las cercanías del Estadio Olímpico Metropolitano, en el extremo sur de San Pedro Sula, se conducía en una camioneta con dos familiares suyos y su chofer.
Sus captores abandonaron a los familiares del periodista y a él se lo llevaron hacia otro extremo, siempre al sur de San Pedro Sula, en una zona de plantaciones de caña de azúcar donde con frecuencia son hallados restos de personas asesinadas.
El director de la Policía Nacional, Juan Carlos Bonilla, dijo a periodistas antes del informe del Ministerio Público que el martes por la tarde se terminaron de hallar los restos del periodista, cuyo cuerpo fue desmembrado.
De acuerdo con las autoridades, ya han sido identificadas ocho personas que participaron directamente en el crimen de Barrow, quien después de ser asesinado con arma de fuego fue quemado parcialmente y después desmembrado.
El director de fiscales agregó que gracias a información de un “ testigo protegido ” , que también participó en el crimen, pero que decidió colaborar informando a las autoridades, han sido identificadas “ ocho personas que participaron directamente en la ejecución del ciudadano Aníbal Barrow ” .
El Ministerio Público mantiene por ahora en reserva los nombres de los que serían autores intelectuales del secuestro y asesinato del comunicador.
La semana pasada las autoridades capturaron a cinco personas, de las que cuatro fueron remitidas a prisión por el caso de Aníbal Barrow.
A una de las personas detenidas se le descubrió que portaba el chip del teléfono móvil del periodista, cuyo secuestro y asesinato ha conmocionado nuevamente a los hondureños.
Organismos de derechos humanos y otras instituciones públicas y privadas han expresado su consternación, repudio y condena por la brutalidad descargada contra el periodista hondureño.
El comisionado de los Derechos Humanos, Ramón Custodio, dijo a los periodistas que “ quienes cultivan la violencia en Honduras buscan intimidar a los que todavía están actuando en esta sociedad ” .
Agregó que la muerte de Barrow “ debe ser un aldabonazo a la conciencia cívica de todos ” y que “ ha llegado el momento de ponerle un punto final a la violencia en este país ” .
Custodio calificó la muerte de Aníbal como “ un crimen abominable y de excesiva crueldad ” .
El organismo que preside Custodio registra la muerte violenta de 36 periodistas hondureños entre 2003 y 2013, incluido Aníbal Barrow.