Jair Bolsonaro se reúne con primer ministro húngaro

Viktor Orban debe enfrentar el 3 de abril su batalla electoral más complicada desde que llegó al poder en el 2010, con seis partidos opositores aliados en su contra. En sus tres períodos consecutivos en el poder, el líder nacionalista siguió una política exterior de acercamiento a Rusia y China, mientras antagonizó con sus aliados de la Unión Europea (UE).

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Brasil es el principal socio comercial de Hungría en América Latina y Orban fue uno de los pocos gobernantes occidentales que asistió a la toma de posesión de Bolsonaro en enero del 2019. En el 2020, Hungría firmó un acuerdo para la compra de dos aviones brasileños de transporte militar KC-390 por un precio no revelado.

La visita de Bolsonaro a Budapest generó críticas y un portal noticioso húngaro la describió como “una proeza diplomática” antes de las elecciones. Orban también visitó a Putin semanas atrás pese a las objeciones de sus aliados europeos.

Bolsonaro, un admirador del expresidente estadounidense Donald Trump y de Putin, se encontró con el líder ruso en su primer viaje oficial a Moscú. Putin saludó el diálogo “constructivo” con el brasileño, quien también enfrenta una dura reelección en octubre, en medio del nivel de aprobación más bajo de su mandato.

Bolsonaro ignoró la presión de Washington, un tradicional aliado de Brasil, y de su propio gabinete, para que cancelara el viaje a Rusia, pues afirmó que el motivo era comercial. Antes de partir a Rusia, Brasil reafirmó de todos modos públicamente sus relaciones diplomáticas con Ucrania.