Washington. EFE. La Fiscalía de Panamá prosiguió este miércoles con el registro del bufete Mossack Fonseca , mientras que el Fondo Monetario Internacional (FMI) consideró el escándalo de los Papeles de Panamá un ejemplo de la necesidad de “transparencia” fiscal y financiera internacional.
La masiva filtración de 11,5 millones de documentos del bufete panameño Mossack Fonseca , especializado en la gestión de capitales en paraísos fiscales desde 1970, continúa generando titulares y provocando reacciones en todo el mundo .
“Para mí, es un caso paradigmático de la necesidad de transparencia a nivel internacional (...), de intercambiar información entre las autoridades fiscales de los países, pero también muy importante en el ámbito financiero”, dijo el director del Departamento de Asuntos Monetarios del FMI, José Viñals.
“La ilegalidad muchas veces se esconde detrás de la opacidad. La información tiene que circular”, afirmó Viñals, luego de comparecer en conferencia de prensa para presentar el informe Estabilidad financiera global del organismo, dirigido por Christine Lagarde.
Viñals urgió a “que todos los países tengan unos estándares apropiados para evitar el lavado de dinero y otras prácticas fraudulentas que se puedan realizar a través del sistema bancario”.
“Algo que –subrayó– el caso de Panamá muestra que estamos lejos de conseguir”.
Por otro lado, la Fiscalía de Panamá continuó este miércoles el registro de las oficinas del bufete Mossack Fonseca que comenzó el martes por la tarde y que abarca la sede, las filiales del grupo y el Data Center Internacional de la empresa que brinda soporte informático.
El objetivo es “obtener documentación que guarde relación con las informaciones publicadas en los artículos noticiosos que establece la posible utilización de la firma en actividades ilícitas”, de acuerdo con la información oficial.