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(Granma/Internet)
La Habana. El Gobierno de Cuba impidió la entrada y mandó de vuelta este miércoles a Bogotá a los expresidentes Jorge Quiroga, de Bolivia, y Andrés Pastrana, de Colombia, quienes viajaron a La Habana para recoger el premio que lleva el nombre del fallecido disidente cubano Oswaldo Payá (1952-2012).
“Es una arbitrariedad y una gran falta de respeto”, aseguró Rosa María Payá, hija del opositor y directora de la Red Latinoamericana de Jóvenes por la Democracia que entrega el lauro, quien confirmó que Cuba envió de regreso a los exmandatarios en el siguiente vuelo de la aerolínea Avianca, previsto para las 3:.50 p. m. hora local.
Payá aseguró que todavía esperaban la llegada de “otros legisladores y expresidentes”, quienes deben asistir este jueves, en la capital cubana, a la entrega del galardón, que reconoce a la Iniciativa Democrática de España y las Américas (IDEA), un grupo formado por 37 expresidentes y exjefes de Gobierno.
“Pregunté que por qué no nos dejaban entrar y (me dijeron) que no, que (ustedes) no son admitidos por el Gobierno cubano”, declaró Pastrana por teléfono a la radio W de Colombia. “Nos han dicho que somos inadmisibles...qué triste”, dijo Quiroga por su parte.
A la actividad también estaba invitado el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almaro, quien solicitó visa.
El diario oficial cubano Granma aseguró este miércoles que Almagro no era bienvenido en la Isla.
Según el rotativo, órgano del Partido Comunista de Cuba (PCC, gobernante), suplaneada visita es una “provocación” que busca “generar inestabilidad y dañar la imagen internacional del país”.
A Almagro se le otorgó en el 2017 el Premio Payá, pero no pudo acudir al acto de entrega en la capital cubana debido a que el Gobierno cubano le negó la visa.
En un artículo a página completa, el periódico subrayó el “desespero” de la “contrarrevolución” en su intento de opacar la celebración de las elecciones generales, previstas para el domingo 11 de marzo en toda la nación.
“Ante su incapacidad de obtener el más mínimo apoyo que no sea por la vía del soborno y el chantaje económico, el único camino es armar un show”, señaló el texto.
Para Granma, debe quedar claro “que ni la OEA ni ninguno de sus funcionarios, mucho menos los que traicionan los principios éticos elementales, han sido ni serán jamás bienvenidos en la Cuba revolucionaria de Fidel (Castro)”.
La Isla comunista consideró que la organización Idea “está compuesta por una selección de promotores del paramilitarismo” y “corruptos que aceptaron millones de dólares a cambio de liberar a terroristas confesos”.
También insistió en que estos exgobernantes son unos “estafadores, responsables de la muerte de decenas de miles de personas en masacres y luchas inefectivas contra el crimen organizado, neoliberales que arruinaron a sus países y pobretones que se hicieron millonarios en la silla presidencial”.
“No es casual tampoco que una mención especial (del premio) haya ido a parar a manos del venezolano Antonio Ledezma, quien se escabulló de la Justicia al amparo de varios gobiernos que se vanaglorian de su combate al terrorismo”, indicó.
