Estambul. AFP Los rebeldes curdos de Turquía desmintieron hoy toda implicación en el atentado suicida que causó 32 heridos ayer en Estambul, y anunciaron la prolongación de la tregua decretada en agosto, indicó la agencia Firat, cercana al Partido de los Trabajadores del Curdistán (PKK).
“No nos es posible efectuar tal acción en el momento en que nuestro movimiento ha decidido prolongar una tregua. No estamos implicados de ninguna manera en ese ataque”, indicó la dirección del PKK en un comunicado, según Firat.
La tregua, decretada el 13 de agosto, y luego prolongada por un mes el 30 de septiembre, continuará hasta las próximas elecciones legislativas, previstas a comienzos de junio del 2011.
“Nuestro movimiento ha decidido prolongar su proceso de no acción hasta las elecciones generales del 2011, para imponer (a Ankara, capital de Turquía) un proceso de solución democrática y garantizar el sano desarrollo de las elecciones legislativas en Turquía”, afirmó el PKK.
El final del alto el fuego prolongado el 30 de septiembre coincidió, ayer, con un atentado suicida contra policías antidisturbios en la plaza de Taksim, en pleno centro de Estambul. En el ataque resultaron heridos 15 policías, además de otras 17 personas.
Las autoridades se han abstenido de todo comentario sobre las pistas seguidas.
“Tenemos en mano algunos datos, pero somos prudentes, no debemos hacer declaraciones prematuras”, dijo declaró hoy a la prensa el ministro del Interior, Besir Atalay, añadiendo que por el momento la policía no ha arrestado a nadie.
El primer ministro, Recep Tayyip Erdogan, denunció: “en algunos países europeos algunas entidades ligadas a la organización terrorista actúan libremente”, un reproche que ya hizo en el pasado, refiriéndose al PKK.
En una entrevista publicada el jueves por el diario turco Radikal, el jefe militar del PKK, Murat Karayilan, aseguró que los rebeldes se comprometerían a no atentar contra civiles y a mantener sin limitación de tiempo su tregua unilateral si el gobierno turco acepta el diálogo.
El responsable hizo sus declaraciones después de que Erdogan lanzara una iniciativa para resolver el problema curdo. Según la prensa, las autoridades han asociado a esta iniciativa a Abdullah Öcalan, líder del PKK condenado a cadena perpetua.
La prensa designaba hoy a los rebeldes como los autores más plausibles del ataque, aunque no descartaba otras pistas, como la del movimiento armado clandestino de extrema izquierda DHKP-C, del que 16 miembros fueron detenidos ayer por la mañana, según el diario Radikal.
La red al-Qaeda también aparecía mencionada como una pista posible.
El PKK es catalogado de organización terrorista por el gobierno turco, la Unión Europea y los Estados Unidos.
El conflicto curdo en Turquía ha costado la vida a más de 45.000 personas desde el comienzo de la insurrección del PKK, en 1984, según datos del ejército.