MÉXICO. EFE Y AFP. La exdirigente sindical, Elba Esther Gordillo, arrestada por presunta malversación de fondos y crimen organizado, fue trasladada por razones de salud este viernes del penal de Santa Martha Acatitla a la cárcel de mujeres de Tepepan, en el sur de ciudad de México.
La exdirigente gremial asegura que desde hace diez años tiene hepatitis viral tipo C, una insuficiencia renal moderada en el riñón derecho e hipertensión arterial sistemática moderada, según datos de su médico privado.
El Gobierno del Distrito Federal explicó que la mujer fue llevada a otro reclusorio ubicado Xochimilco ya que el anexo del penal Tepepan cuenta con mayor infraestructura médica para ser atendida en caso de emergencia.
El traslado se realizó atendiendo a la petición del médico de Gordillo y al diagnóstico de los galenos del Sistema Penitenciario.
La red penitenciaria de la capital mexicana aclaró que el trato a Gordillo es sin privilegios y solo atiende a los mandatos médicos.
Además, sufre dos aneurismas saculares en arterias cerebrales medias, atropia en la pared muscular abdominal y diverticulosis, entre otros padecimientos.
Gordillo presentó una queja ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) , en la que argumentó que sufrió incomunicación y abusos por parte de los policías federales que la detuvieron.
La dirigente, quien encabezó durante casi 24 años el poderoso Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación mexicano (SNTE) , está presa acusada de delitos muy graves que impiden que se beneficie de una fianza y hasta ahora se ha reservado a declarar.
Según la fiscalía, Gordillo se benefició presuntamente de una triangulación financiera que usaba aportes sindicales para cubrir gastos personales como compras en una tienda departamental de lujo, tratamientos de cirugía estética, adquisiciones inmobiliarias y el mantenimiento del avión que utilizaba para sus trámites.
Además de ella están detenidas otras tres personas que presuntamente sirvieron para canalizar fondos del SNTE por un monto superior a 2.000 millones de pesos (157 millones de dólares), con el fin de cubrir los gastos de Gordillo.
El jueves, el secretario general del SNTE, Juan Díaz de la Torre, reemplazó a Gordillo en la presidencia del gremio de maestros, que agrupa a 1,2 millones de afiliados en México y es considerado uno de los sindicatos más grandes de América Latina.
El sindicato, que en la década de 1990 paralizaba la ciudad de México con masivas manifestaciones contra el Ministerio de Educación, no ha anunciado movilizaciones de protesta por la detención de su otrora líder y las clases han transcurrido con normalidad.