Excomandante de Ejército chileno condenado por encubrir asesinatos durante dictadura de Pinochet

El fallo también obliga al Estado a indemnizar con $280.000 (¢168 milllones) en total a los familiares de las víctimas.

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Santiago. La justicia chilena condenó este viernes al excomandante del Ejército Juan Emilio Cheyre, a tres años de libertad vigilada por encubrir 15 homicidios en 1973, cerrando uno de los episodios del siniestro caso “Caravana de la Muerte” durante la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990).

El juez Mario Carroza condenó a Cheyre, comandante del Ejército de Chile entre 2002 y 2006, “a tres años y un día de presidio, con el beneficio de la libertad vigilada” en calidad de “encubridor” de los 15 asesinatos ocurridos en octubre de 1973 en la ciudad de La Serena (norte), un mes después del golpe militar que instauró la dictadura de Pinochet, indica el fallo difundido por el Poder Judicial.

Cheyre era juzgado en calidad de cómplice, pero el juez Carroza rebajó la condición a encubridor porque “no hay certeza acerca de que haya participado en actos anteriores o simultáneos a la ejecución de las víctimas”, según el fallo.

El excomandante del Ejército deberá presentarse mensualmente a firmar ante un oficial de Gendarmería (guardia de prisiones).

La defensa de Cheyre se declaró insatisfecha con el fallo y anunció que recurrirá el fallo ante la Corte de Apelaciones. “Juan Emilio Cheyre es completamente inocente”, dijo Jorge Bofill, abogado del excomandante, en un comunicado.

El fallo también obliga al Estado a indemnizar con $280.000 en total a los familiares de las víctimas.

Este fallo cierra una investigación que Carroza comenzó hace dos años en el marco del caso Caravana de la Muerte, en la que 75 prisioneros políticos fueron asesinados por orden directa de Pinochet, quien fue procesado y puesto bajo arresto domiciliario por este caso, pero fue sobreseído por demencia, sin alcanzar a ser condenado.

Cheyre fue detenido en 2016 por este caso tras ser acusado de haber encubierto los asesinatos. Días después fue puesto en libertad tras pagar una fianza de unos $1.500.

El ejército, en un comunicado, “lamenta la situación personal” de su comandante en jefe desde el 10 de marzo de 2002 al 9 de marzo de 2006, y “reitera su absoluto respeto y compromiso con el Estado de derecho”, absteniéndose de opinar sobre las resoluciones que adopte la justicia.

Según la investigación del caso, Cheyre se desempeñaba en ese tiempo como ayudante de Ariosto Lapostol, comandante del regimiento Arica de la ciudad de La Serena, donde 15 opositores de la dictadura fueron sentenciados a muerte en procesos militares y luego ajusticiados en octubre de 1973.

Tras los asesinatos, el Ejército informó que las víctimas eran “quince extremistas” que fueron juzgados “en cumplimiento de lo resuelto por Tribunales Militares en Tiempos de Guerra”. Esa versión fue publicada en medios de prensa por Cheyre por orden de Lapostol.

El fallo afirmó que ambos oficiales “tenían la certeza” de que la publicación era falsa y “que el ajusticiamiento ocurre sin juicio previo, fundado en la sola circunstancia de la ideología” de las víctimas.

“Hemos logrado resultados justos y que establecimos la verdad histórica. Creo que llegamos a la conclusión de que se produjeron actos deshumanizados”, afirmó el juez Carroza.

En tanto, Lapostol fue condenado a 15 años de cárcel, mientras que cinco exoficiales deberán purgar cinco años de presidio, y otros cuatro exuniformados tres años de libertad vigilada.

En 2004, cuando Cheyre era comandante del Ejército, publicó una polémica columna en un diario local en la que afirmaba que la institución militar había asumido “las responsabilidades por los hechos punibles y moralmente inaceptables del pasado” y que haría “esfuerzos concretos para que nunca más vuelvan a repetirse”.

Durante la dictadura, unas 3.200 personas murieron o fueron desaparecidas, mientras que unas 38.000 fueron torturadas, según datos oficiales.