La nueva fuente de agua que instalarán en la Plaza de la Cultura antes de octubre del 2016 no se parecerá a la actual. Por ella se podrá caminar, los niños tendrán un nuevo sitio para jugar y mojarse, mientras los adultos se deleitarán con un espectáculo de música e iluminación.
Esta transformación va de la mano con la filosofía que las autoridades a cargo de la estructura (Fundación de los Museos del Banco Central y el Banco Central) le quieren imprimir a la pronto renovada Plaza de la Cultura: que las personas sean las protagonistas. La idea es que los ciudadanos puedan transitar libremente por este espacio público y consigan apreciar de una manera más reposada diferentes elementos artísticos como el Teatro Nacional, la misma plaza y su nueva fuente.
Desde el 4 de abril, el consorcio formado por las empresas GCI Ingeniería S.A., Constructora Gonzalo Delgado S.A. y Consultora Salper S.A. trabajan en su reestructuración y el sitio permanecerá cerrado hasta el 7 de noviembre de este año.
Las recientes obras se inspiran -en parte- en el diseño original que tenía la Plaza cuando se inauguró en 1982 y que fue delineado por los arquitectos nacionales Jorge Bertheau, Jorge Borbón y Édgar Vargas (ya fallecido).
Sin rejas, ni obstáculos
Rafael Marín, arquitecto del Banco Central y quien forma parte del equipo que encabeza la remodelación, explicó que uno de los aspectos que diferenciará a la fuente que se instalará, de la existente en estos momentos, es que ya no contará con rejas a su alrededor. La idea es que los niños, jóvenes, adultos y personas de la tercera edad se desplacen por ella; que se convierta en un área de diversión y así se aproveche el espacio urbano.
Para Marín, los espacios públicos no tienen que poseer verjas, obstáculos, ni huecos (como la fuente actual), más bien deben invitar a los habitantes a interactuar con estos.
“La primera fuente que tuvo la plaza (desde 1982) fue diseñada como un espejo, que le permitía al interior del edificio y a los muros del edificio vibrar con el movimiento de la luz a través del agua”, recordó.
En 1996, cuando se realizaron varios trabajos para impermeabilizar la Plaza se cambió la fuente por la que está hoy.
Aunque no se retomará totalmente el diseño de la estructura original, la nueva tendrá algunas características similares. Para lograrlo, se incorporarán elementos de vidrio sobre el piso de la fuente que permitan el ingreso de diferentes puntos de luz para tratar de buscar el “efecto que a nivel de diseño generaba una gran riqueza” en la antigua fuente.
El piso de la fuente tendrá cuatro tonos grisáceos, que buscan “vincularse y dialogar aún más” con la fachada norte del Teatro Nacional, dijo Marín.
¡Un colorido espectáculo!
Según el arquitecto, la fuente tendrá un área de 55 metros cuadrados y estará hecha de un material llamado gres porcelánico, de manera que la gente podrá estar sobre ella, disfrutar del agua, ya sea para mojarse o para escuchar el sonido que produce al caer.
Se iluminará con diversos colores para generar un espectáculo. A ello se le suma que tendrá melodías, que incluirán música clásica, electrónica y otros géneros que todavía se están definiendo en procura de respetar los derechos de autor de sus propietarios (en caso de estar protegidos).
En cuanto a su tecnología, Marín detalló que la fuente poseerá un sistema inteligente de chorros, de forma tal que si hace mucho viento se controlará la altura de estos. Si no hace viento, entonces el chorro alcanzará alturas de tres o cuatro metros, según la intensidad de la música.
El piso de gres porcelánico viene fabricado con un orificio en el centro por donde se ubican 52 boquillas. De esas boquillas saldrá agua a presión, y cada una de ellas tendrá luz.
“Debajo de ese piso hay un reservorio de agua de aproximadamente 35 metros cúbicos de agua, que lo vamos a cambiar probablemente una o dos veces al año para efectos de mantenimiento”, agregó Marín.
La fuente tiene un sistema de bombeo que permanentemente mantendrá el agua en movimiento y que, además, filtrará las impurezas que se generen.
Para darle una mejor imagen a la plaza también se eliminarán algunas plantas y pequeños arbustos que generan problemas, como plagas de cucarachas.
Asimismo, el sitio será más accesible para las personas con discapacidad por medio de la colocación de rampas en lugares estratégicos.