Hermine, el primer huracán en azotar Florida en más de una década tras tocar tierra en la madrugada del viernes, se debilitó pero sigue siendo una seria amenaza para la vida.
Degradada a tormenta tropical, el centro de Hermine se ubicaba unos 80 km al noreste de Tallahassee, la capital de Florida, y a las 09H00 GMT (3 a. m. hora de Costa Rica) ya había ingresado en Georgia, informó el Centro Nacional de Huracanes (NHC), con sede en Miami.
Vientos de 110 km/h y fuertes precipitaciones provocaron inundaciones y cortes de energía a decenas de miles de personas a medida que Hermine se desplazaba hacia el noreste a unos 22 km/h.
Hermine tocó tierra en Florida como huracán de categoría uno a eso de las 01H30 local (05H30 GMT) cerca de St. Marks, al sur de Tallahassee, dijo el NHC.
"Hay peligro de inundaciones capaces de amenazar la vida en las próximas 12 a 24 horas a lo largo de la costa del Golfo de Florida", agregó.
Amenaza
El alcalde de Tallahassee, Andrew Gillum, dijo que la tormenta había derribado muchos árboles y cables de alta tensión, dejando a unos 100.000 clientes sin energía eléctrica.
"Si no tienen que salir, no salgan", instó.
"Esto implica riesgos de vida", dijo el gobernador Rick Scott a la prensa el jueves, urgiendo a los residentes a tomar en serio las advertencias.
"Tenemos un huracán. Se puede reconstruir una casa. Se puede reconstruir una propiedad. No se puede reconstruir una vida", aseveró.
Scott había declarado el miércoles el estado de emergencia en 51 condados del estado para liberar recursos ante eventuales daños.
Cientos de centros de estudio y oficinas públicas permanecían cerradas, mientras se espera el impacto completo de la tormenta este viernes.
Hermine fue el primer huracán en azotar Florida en 11 años, después de Wilma en 2005.
El último huracán en tocar tierra en Estados Unidos fue Arthur en 2014 en Carolina del Norte.
El portavoz del Pentágono Jeff Davis dijo que fueron activados 100 efectivos de la Guardia Nacional, que otros 6.000 permanecen en alerta en el estado, y que 34.000 están listos para ser desplegados desde otras regiones de Estados Unidos en caso de necesidad.
El presidente Barack Obama pidió a Craig Fugate, administrador de la agencia de manejo de emergencias FEMA, "que lo mantenga actualizado y alerta si hay alguna necesidad importante que cubrir", dijo el portavoz de la Casa Blanca Josh Earnest.