“A Musa Kusa no se le ha ofrecido ninguna inmunidad de la justicia británica o internacional. Está hablando voluntariamente con autoridades británicas en este momento”, agregó Hague.
“Su renuncia muestra que el régimen de Gadafi, que ya ha visto varias deserciones importantes hacia la oposición está fragmentada, bajo presión y hundiéndose desde dentro”, afirmó en un acto organizado en su ministerio.
Musa Kusa anunció su dimisión a su llegada al aeropuerto de Farnborough, cerca de Londres, el miércoles por la noche procedente de Túnez.
El anuncio de que el excanciller no tendrá un tratamiento de preferencia enfría las conjeturas referentes a que el Gobierno británico buscaría soslayar las acusaciones en contra del ministro -hechas por la oposición libia- acerca de que tuvo un papel central en el atentado contra el vuelo 103 de Pan Am sobre la población escocesa de Lockerbie en de Lockerbie de 1998, entre otras atrocidades.