Washington. AFP y AP Tan solo cinco días después de convertirse en la decana de la humanidad, la estadounidense Gertrude Weaver falleció el lunes a los 116 años, informaron varios medios de comunicación.
Gertrude Weaver, que habría cumplido 117 años el 4 de julio, murió a causa de complicaciones derivadas de una neumonía, en un asilo de ancianos del estado de Arkansas (sur).
Esta mujer, nacida en 1898, se había convertido en la decana de la humanidad el 1.° de abril, luego de la muerte de la japonesa Misao Okawa, a los 117 años.
“Sabía que era la decana de la humanidad, y estaba muy contenta. Apreciaba cada llamada, cada carta, cada comentario”, declaró al Washington Post Kathy Langley, una de las responsables del Centro de Salud y Rehabilitación Silver Oaks, en Camden, donde falleció la anciana.
Interrogada sobre el secreto de su longevidad, Weaver había declarado a un diario de Arkansas que se debía, entre otros, a que “trataba bien a todo el mundo”.
Hija de agricultores, Gertrude Weaver era la menor de seis hermanos.
Tuvo cuatro hijos, de los cuales el único aún en vida cumplió 94 años el pasado martes, según el Washington Post.
Marie Trisollini, alcaldesa de Madison, conversó la semana pasada con Weaver cuando la compañera de cuarto de la mujer cumplió 100 años.
“En verdad era una mujer muy dulce. Cuando hablé con ella antes de la fiesta estaba relativamente alegre y coherente”, manifestó Trisollini.
“Cuando le pedías consejos sobre cómo tener una larga vida ella decía: ‘Usa mucha crema humectante, trata bien a todos, ama a tus vecinos y come los alimentos que cocines. No comas en restaurantes de comida rápida’”.
El Grupo de Investigación pudo verificar la edad de Weaver usando registros del censo y un certificado de matrimonio que databa de 1915 donde se establecía que tenía 17 años. Otros documentos señalaban que tal vez hubiera nacido en abril pero eso no pudo confirmarse, por lo que el grupo usó como fecha de nacimiento el día en que la mujer decía haber nacido, el 4 de julio.
Trisollini dijo que el asilo y varios de sus residentes habían hecho planes para celebrar el cumpleaños 117 de Weaver.