Managua (AP). Con los rostros cubiertos y armados con morteros artesanales palos y piedras, decenas de supuestos estudiantes se enfrentaron nuevamente el miércoles en una batalla campal en los predios de la Universidad Nacional de Nicaragua.
Los problemas en la Universidad Nacional se han agudizado debido a la inconformidad de los estudiantes ante las elecciones de las nuevas autoridades del alma mater.
Exigiendo la apertura del campus universitario y la reanudación de clases suspendidas desde la semana pasada, un grupo de jóvenes, algunos de ellos vistiendo batas de médicos y mostrando sus credenciales de estudiantes, fueron repelidos con disparos de morteros.
Los supuestos estudiantes lograron ingresar a los predios del máximo centro de estudios y los disparos de morteros se escucharon por diferentes lugares, los dos bandos sacaron sus armas artesanales y hasta lanzaron una bomba de gas lacrimógeno.
“No van a pasar vende patrias, aquí se van a morir,” dijo un joven cubierto de su rostro, mientras maniobraba con gran pericia el arma artesanal que acciona encendiendo la mecha de una bomba a la que llaman caramelo. Estos “caramelos” son fabricados con pólvora mezclada con pedazos de metal.
Una de las jóvenes vestida con bata blanca, con lagrimas en los ojos les gritaba que no les dispararan, “nosotros no queremos violencia, solo queremos estudiar,” pero respondieron lanzándole piedras y también salió huyendo.
Pero Xiomara Oporto, que se identificó como estudiante universitaria y al parecer es una de los líderes de la Unión Nacional de Estudiantes de Nicaragua (UNEN), responsabilizó de los disturbios a los jóvenes que trataron de ingresar al campus.
Los morteros son accionados por muchachos, mientras las mujeres se encargan de llevarles los caramelos para atacar a sus adversarios.
Mientras la universidad parecía un campo de guerra y los supuestos estudiantes se enfrentaban con armas cuyas explosiones se podían escuchar a kilómetros, en la zona no se encontró un solo policía.
La jefa de Relaciones Públicas de la Policía Nacional, comisionada mayor Vilma Reyes, declaró a periodistas que el cuerpo policial no ha intervenido debido a que la Ley de Autonomía de instituciones de Educación Superior les impide actuar.
En los brutales enfrentamientos del martes, un joven estudiante de medicina identificado como Eder Omar Ruiz, recibió una paliza que lo dejó inconsciente en el piso y luego fue trasladado de emergencia a un hospital donde se recupera. Otros dos jóvenes resultaron con heridas y golpes producidos por las piedras.
El Consejo de la universidad decidió que para las elecciones de los decanos de las facultades participarán profesores, siete trabajadores administrativos y los dos principales líderes de cada centro universitario.
Pero los dirigentes de la UNEN han dicho que mantendrán cerrados los portones de acceso a la Universidad mientras las máximas autoridades no propongan una solución a su demanda de no reducir la participación de los estudiantes en los procesos electorales.
Los universitarios exigen mayor participación en el proceso de elección de las nuevas autoridades y han dicho que no cederán hasta que cumplan sus exigencias.
La toma de la Universidad Nacional y los Centros Universitarios Regionales de Matagalpa, Chontales y Carazo afecta a 28.000 estudiantes en todo el país desde hace una semana.