San Salvador. AFP. Los empresarios de El Salvador pidieron al presidente Mauricio Funes que encabece una cruzada contra la delincuencia, para evitar que el hampa, en particular las pandillas, pongan “en jaque” a los salvadoreños.
“Los últimos hechos han sido gravísimos, el incremento de homicidios, los robos, todo eso nos hace pedir de nuevo al presidente Mauricio Funes que encabece una verdadera cruzada nacional contra la delincuencia”, dijo el líder de la Cámara de Comercio, Jorge Daboub.
Por hechos recientes como la quema de un autobús y el ametrallamiento de otro por parte de pandilleros en los que fallecieron 19 personas, el gobierno debe impulsar “todas las acciones necesarias” que le permita la Constitución para proteger a la ciudadanía, afirmó.
Tras los ataques a los microbuses, el gobierno adelantó sus planes para desplazar a 1.500 soldados al interior de centros penitenciarios para evitar que pandilleros presos y el crimen organizado alisten delitos desde allí. Desde el lunes, otros 1.000 soldados fueron enviados a varios puntos fronterizos para frenar el ingreso de armas, drogas e indocumentados.
“Lo que estamos viviendo es algo dramático, la población se siente indefensa ante las pandillas y ante toda la delincuencia, eso demanda que haya medidas urgentes para frenar ya la violencia”, consideró Raúl Melara, de la Asociación Nacional de la Empresa Privada.
El gobierno de Funes diseña una nueva ley para combatir a las pandillas cuyo contenido discute con los demás partidos para garantizar su eventual apoyo en el Congreso.
El Salvador enfrenta una amplia ola delincuencial que deja una media de 13 asesinatos diarios, además de numerosos asaltos a mano armada en plena vía pública o en unidades de transporte colectivo.