Seúl
Corea del Norte negó este viernes haber torturado o maltratado en la cárcel al estudiante estadounidense Otto Warmbier, fallecido tras haber sido liberado en estado de coma, y acusó a Estados Unidos de llevar a cabo una "campaña difamatoria".
Es la primera reacción de Corea del Norte al anuncio del fallecimiento, el lunes en Estados Unidos, del estudiante de 22 años repatriado el 13 de junio en coma.
El joven estaba condenado en Corea del Norte a 15 años de trabajos forzados por el robo de un cartel propagandístico.
"Aunque no teníamos razón alguna para mostrar misericordia a un delincuente del Estado enemigo, le proporcionamos atención médica y cuidados con base en razones humanitarias hasta su regreso a Estados Unidos (...) considerando que su salud empeoró", dijo un portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Pionyang, según un informe de la agencia oficial norcreana KCNA.
Según esa fuente, las especulaciones "infundadas" sobre torturas y palizas podrían ser refutadas por los médicos estadounidenses que viajaron al hermético país para examinar a Warmbier antes de su puesta en libertad.
"Para dejarlo claro, afirmó, somos la mayor víctima de este incidente y no habría juicio más absurdo que pensar que no sabemos calcular las ganancias y las pérdidas".
Un portavoz de la Cancillería norcoreana acusó a Estados Unidos de llevar a cabo "una campaña difamatoria" contra su país.
El presidente estadounidense, Donald Trump, calificó de "escándalo" lo sucedido.
Los médicos del centro hospitalario estadounidense donde fue internado el joven dijeron que Warmbier sufrió una grave lesión neurológica por una causa desconocida. Según supieron sus familiares, el estudiante de la Universidad de Virginia estaba en coma desde poco después de haber sido a condenado a 15 años de trabajos forzosos en Corea del Norte, en marzo del 2016.
Corea del Sur también responsabilizó de la muerte de Warmbier al régimen "irracional" de Pionyang, que acusa a su vez a Seúl de usar el fallecimiento del muchacho para obtener la liberación de seis presos surcoreanos.
"No tienen ni la más mínima idea de lo bien que se trató a Warmbier (...) pero se atreven a pronunciar las palabras de 'malos tratos' y 'tortura'", manifestó el portavoz del Consejo para la Reconciliación Nacional, según KCNA.
Otto Warmbier fue enterrado el jueves.