Turquía y Grecia volverán a hablar sobre diferendo en el Mediterráneo oriental

Ambos países mantienen disputas por límites marinos y riquezas naturales

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ankara. Turquía y Grecia, que han vivido momentos de gran tensión en las últimas semanas, acordaron el martes reanudar el diálogo sobre el Mediterráneo oriental, una novedad desde la última ronda de conversaciones de 2016.

El acuerdo para abrir esas negociaciones se formalizó durante una videoconferencia entre el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan; la canciller alemana, Ángela Merkel, y el jefe del Consejo Europeo, Charles Michel, aseguró la Presidencia turca.

Grecia y Turquía han protagonizado una grave escalada de maniobras militares en las aguas que dividen a ambos países.

Según la Presidencia turca, los participantes afirmaron que “Turquía y Grecia están dispuestos a comenzar negociaciones exploratorias” sobre el Mediterráneo oriental, donde ambos países se disputan zonas potencialmente ricas en gas natural.

Grecia confirmó el martes que reanudará negociaciones exploratorias con Turquía por primera vez desde el 2016, con el objetivo de reducir las tensiones entre estos dos países miembros y aliados en el seno de la OTAN.

“Grecia y Turquía han acordado mantener (...) conversaciones exploratorias, pronto en Estambul” indicó en un comunicado el Ministerio de Relaciones Exteriores griego.

Erdogan afirmó en la videoconferencia que "el impulso tendiente a bajar las tensiones y explotar los canales de diálogo debe ser apoyado con medidas recíprocas", según la misma fuente.

Las exploraciones geológicas turcas en aguas dentro de territorio griego despertaron la indignación de Atenas, que movilizó fuerzas navales y apeló a sus socios de la Unión Europea.

Turquía considera que tiene derecho a explotar los yacimientos de hidrocarburos en la zona marítima.

Amagos de distensión

En Atenas, el Ministerio de Relaciones Exteriores griego indicó que las conversaciones programadas se realizarán en Estambul, pero sin precisar la fecha.

Erdogan manifestó el pasado viernes que está dispuesto a entrevistarse con el primer ministro griego, Kyriakos Mitsotakis, si ve signos de “buena intención” de su parte.

El 10 de agosto, Turquía envió un barco de prospección sísmica acompañado de barcos de guerra a aguas entre Grecia y Chipre. La tensión se agravó a fines de agosto, cuando ambos países efectuaron maniobras militares rivales.

La crisis está en la agenda de una cumbre europea que debía celebrarse el 24 y 25 de setiembre en Bruselas antes de ser aplazada a inicios de octubre, pues varios países, especialmente Francia, esgrimieron la amenaza de sanciones contra Turquía.

Otra señal de calma la envió Francia, que apoya a Grecia en esta crisis, con el anuncio por el palacio del Elíseo de una entrevista telefónica prevista en la noche entre el presidente Emmanuel Macron y Erdogan, quienes han tenido intercambios tensos y vehementes en las últimas semanas.

Para aprobar sus reivindicaciones sobre los sectores disputados en el Mediterráneo Turquía y Grecia firmaron en los últimos meses acuerdos de delimitación marítima respectivamente con el gobierno libio de Trípoli y con Egipto.

En un encuentro con periodistas el martes, el embajador de Estados Unidos en Turquía, David Satterfield, afirmó que “ninguna carta o declaración unilateral que impacte los derechos de una tercera parte vale en el marco de una solución de una disputa marítima”.

Otro signo de calma es que Erdogan pidió el martes un "diálogo sincero" para resolver el conflicto entre su país, Grecia y la Unión Europea en el Mediterráneo, rechazando al mismo tiempo cualquier "acoso" contra Turquía.

“Nuestra prioridad es resolver los conflictos mediante un diálogo sincero, basado en el derecho internacional y sobre una base equitativa”, declaró el jefe de Estado turco en su discurso ante la Asamblea General de las Naciones Unidas por videoconferencia.

"Sin embargo, quiero dejar claro que nunca toleraremos ningún tipo de imposición, acoso o ataque", añadió.

Propuso además la organización de una conferencia regional para discutir “derechos e intereses” de los países del Mediterráneo oriental, que incluye también a la autoproclamada República Turca del Norte de Chipre.

Para “dar oportunidad a la diplomacia”, Turquía retiró el 13 de setiembre el barco de investigación, el Oruç Reis, cuyo despliegue en el Mediterráneo oriental había agudizado la tensión.