Teherán. Un petrolero iraní fue alcanzado este viernes por dos supuestos disparos de misiles en el mar Rojo, a un centenar de kilómetros de un puerto saudí, en el primer incidente que afecta a un buque con pabellón de Irán tras una serie de ataques en el golfo Pérsico.
El altercado se produce en medio de vivas tensiones entre Irán, por un lado, y Arabia Saudí y su aliado estadounidense, por otro. Estos dos últimos acusaron recientemente a Teherán de estar detrás de ataques contra instalaciones petroleras del reino, lo que Irán desmiente.
La National Iranian Tanker Company (NITC), operador que administra la flota de navíos petroleros de Irán, declaró que el casco del Sabiti recibió el impacto de dos ‘explosiones’ a unos 100 km de las costas saudíes, frente al puerto de Yeda (oeste).
Las detonaciones “probablemente estuvieron causadas por impactos de misiles”, afirmó la NITC, y precisó que resultaron dañados unos 1,5 m² del casco.
“Todos los miembros de la tripulación están sanos y salvos”, añadió NITC, que precisó que las personas a bordo del Sabiti estaban tratando de reparar los daños.
"No hay ningún incendio a bordo", afirmó.
El ataque provino “desde un estrecho cerca del corredor (marítimo por el que transitaba el buque), en el este del mar Rojo”, indicó el Ministerio de Relaciones Exteriores iraní.
Según la televisión estatal iraní, es posible que el incidente fuese provocado por "un ataque terrorista". En fotografías publicadas por la misma televisión, el puente del barco no parece dañado.
Las explosiones causaron una fuga de petróleo en el mar, según la agencia Isna.
Una investigación sobre “este acto irresponsable” está en curso, afirmó Abas Musavi, portavoz de la diplomacia iraní.
Según la web TankerTrackers, que sigue los movimientos de los buques-cisterna, el Sabiti transporta un millón de barriles de petróleo y su destino es el golfo Pérsico.
Tras el incidente, el precio del crudo subió más de un 2%. "Esto aviva el fuego en Oriente Medio", según Bjarne Scheldrop, analista del banco suizo SEB.
El precio del petróleo subió “debido al riesgo de que un incidente similar se produzca en Irán, Arabia Saudita o Irak”, declaró a la AFP la analista Thina Margrethe Saltvedt.
Se trata del último de una larga serie de incidentes en la región, especialmente tras unos ataques ocurridos en Arabia Saudí, la incautación de petroleros en el Golfo y la destrucción de un dron estadounidense por parte de Teherán.
En setiembre, Arabia Saudí y Estados Unidos, y después Alemania, el Reino Unido y Francia, acusaron a Irán de ser responsable de unos ataques aéreos contra dos yacimientos petroleros estratégicos en el este del reino wahabita, que provocó un aumento de los precios del crudo de un 20% durante un breve lapso.
Teherán negó cualquier implicación en estos ataques, reivindicados por los rebeldes hutíes chiitas de Yemen, que reciben el apoyo de Irán y combaten contra una coalición militar liderada por Riad.