Ramala. AFP. Los palestinos anunciaron ayer su intención de adherirse a la Corte Penal Internacional (CPI) para acusar a los dirigentes israelíes de “crímenes de guerra”, endureciendo su confrontación con el Estado hebreo tras el fracaso de su ofensiva en la ONU .
Los palestinos buscaron que el Consejo de Seguridad adoptase una resolución que establecía un plazo de un año para alcanzar un acuerdo final de paz con Israel y el retiro de los territorios palestinos ocupados desde 1967. Sin embargo, la iniciativa fue rechaza el martes.
Con la adhesión a la CPI, el presidente palestino, Mahmud Abas, pretende ejecutar una amenaza que le permitiría denunciar a las autoridades israelíes en La Haya por crímenes de guerra , incluyendo el genocidio.
El acceso a la justicia internacional apuntaría especialmente a las ofensivas en la franja de Gaza, y enfrenta la fuerte oposición de Israel y de Estados Unidos.
Tras el rechazo a la resolución en la ONU, a los palestinos les quedan pocas opciones, y una de ellas es romper la cooperación de seguridad con Israel, que podría implicar la disolución de la Autoridad Palestina .
En el Consejo de Seguridad de la ONU, la resolución recibió ocho votos a favor, dos en contra y cinco abstenciones (de los nueve necesarios para ser adoptada), por lo que Estados Unidos no tuvo que ejercer su derecho al veto.
El veto, que Mahmud Abas pretendía capitalizar después de que fracasaran las negociaciones impulsadas por Estados Unidos, no fue necesario luego de que Nigeria, que según los palestinos había prometido apoyar su causa, se abstuviera de votar.