Beirut
El grupo Estado Islámico (EI) lanzó este sábado una ofensiva contra una localidad controlada por combatientes kurdos en el noreste de Siria, al tiempo que bombardeos del régimen dejaban 26 yihadistas muertos en el centro del país, informó una ONG.
"El EI avanzó en ciertos sectores periféricos de Tal Tamer", a unos 40 kilómetros al sur de la frontera turca, afirmó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), con sede en Gran Bretaña.
No obstante, los combatientes kurdos, apoyados por la milicia cristiana asiria, los repelieron hacia el sur de esta localidad estratégica, cuya conquista abriría a los yihadistas un corredor para llegar a la frontera iraquí.
Desde el inicio de la ofensiva yihadista en la provincia de Hasake, el 23 de febrero, el grupo EI ha tomado el control de por lo menos 10 pueblos alrededor de Tal Tamer.
"Combatientes cristianos asirios se retiraron de ciertos sectores para ir a Tal Tamer y combatir con los kurdos que defienden la ciudad", afirmó Usama Edward, de la Red Asiria de Derechos Humanos, con sede en Suecia.
El mes pasado, los yihadistas secuestraron a 220 asirios cristianos en esta provincia mayoritariamente kurda, provocando la huida de miles más. Hasta ahora, ha habido 23 liberaciones, a cambio del cobro de una "jizya", impuesto que se hace pagar a quienes no son musulmanes.
Por otra parte, 26 yihadistas murieron en varios ataques de la fuerza aérea siria en la provincia de Hama, en el centro del país, indicó el OSDH.
La agencia oficial Sana afirmó que la fuerza aérea, que llevó a cabo una operación especial en Hama, destruyó decenas de vehículos de un convoy militar del grupo EI.
Ataque a otro Patrimonio. Miembros del grupo yihadista EI destruyeron y saquearon este sábado la ciudad de Hatra, de hace más de 2.000 años y declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, en el norte de Irak, denunció el Ministerio iraquí de Turismo y Antigüedades.
Este ataque contra Hatra, capital del reino de los partos, se produce después de que el jueves los yihadistas arrasaran con la ciudad asiria de Nimrud, y una semana antes destruyeran el Museo de la Civilización de Mosul, todos ellos en la provincia septentrional de Nínive.
"La lentitud del respaldo de la comunidad internacional a Irak alentó a los terroristas a perpetrar otro crimen con el saqueo y destrucción de la ciudad Hatra, incluida en la lista del patrimonio mundial", lamentó el Ministerio de Turismo y Antigüedades en un comunicado.
El departamento criticó que pese a las advertencias de que los crímenes del EI iban a proseguir en otros lugares arqueológicos, la respuesta no ha estado al nivel requerido.