EscucharBeirut
El líder de un grupo rebelde islámico ultraconservador en Siria pereció este martes en un atentado suicida junto con otros de sus altos directivos, informaron sus aliados, lo que debilita las filas de la ya afectada oposición armada del país.
Ningún grupo reclamó de inmediato la responsabilidad por el ataque que mató a Hasán Abud y a otros líderes de Ahrar al-Sham, que es parte del frente más fuerte que ha retado al Estado Islámico, grupo terrorista que mantiene el control de gran cantidad de territorio en Irak y Siria.
Sin embargo, dado que las fuerzas leales al presidente Bashar al-Asad por lo general no usan atacantes suicidas, parece probable la participación de fuerzas de la poco definida mezcla de combatientes de la oposición en la guerra civil siria, que comenzó hace tres años.
El ataque fue contra una reunión de alto nivel de Ahrar al-Sham (Movimiento Islámico de Hombres Libres del Levante) que se celebraba en la localidad Ram Hamdan, en la provincia siria de Idlib, uno de sus bastiones.
Un comunicado del grupo indicó que la explosión mató a Abud, también conocido por su nombre de guerra: Abu Abdullah al-Hamwi, y otros 11 altos líderes.
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En la imagen se muestra a una brigada del grupo islámico ultraconservador Ahrar al-Sham durante un enfrentamiento con las fuerzas de gobierno. (AFP.)
"Cayeron en una explosión dentro del lugar donde se reunían", expresó un comunicado en la cuenta de Twitter del Frente Islámico, la coalición rebelde a la que pertenecía.
El colectivo activista Edlib News Network, el Observatorio Sirio de Derechos Humanos y medios estatales sirios también reportaron la muerte de Abud. Los informes de activistas indicaron que los hombres murieron en un atentado suicida.
La red noticiosa Edlib News Network dijo que más de 40 personas perecieron en la explosión. El Observatorio, que depende de una red de activistas en Siria para sus informes, dijo que decenas de personas murieron.
Ahrar al-Sham pertenecía al Frente Islámico, una alianza de siete poderosos grupos rebeldes conservadores y ultraconservadores que se fusionaron a finales de noviembre.
El Frente Islámico desea imponer la ley islámica en Siria y rechaza a la Coalición Nacional, respaldada por Occidente, pero coopera con algunos de sus combatientes en el terreno.
