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Caracas
Los expresidentes de Costa Rica Laura Chinchilla y Miguel Ángel Rodríguez participaron, este sábado en Caracas, en una reunión que mantuvieron varios exmandatarios latinoamericanos con el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro.
En la reunión, previa a las elecciones de este domingo, participaron —además de Chinchilla y Rodríguez— el exmandatario colombiano Andrés Pastrana, la expresidenta panameña Mireya Moscoso, el expresidente boliviano Jorge Quiroga y el exmandatario de Uruguay Luis Alberto la Calle.
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Pese a los frecuentes y ásperos enfrentamientos verbales frente a los micrófonos, sobre todo entre Maduro y Pastrana, se pudo apreciar en imágenes difundidas por la televisión estatal venezolana que hubo momentos de distinción en los que el anfitrión venezolano y los exmandatarios se saludaron afectuosamente e incluso compartieron impresiones que dejaron escapar sonrisas.
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De izquierda a derecha, el expresidente de Uruguay Luis Alberto Lacalle, la exmandataria costarricense Laura Chinchilla, el expresidente de Colombia Andres Pastrana y el presidente venezolano, Nicolás Maduro. (Ariana Cubillos)
"Yo creo que hemos cumplido buena parte de los objetivos de la misión que desde hace ya algunos meses habíamos presupuestado de venir... a acompañar el proceso electoral del próximo domingo. Vinimos invitados por la MUD (la alianza opositora)... solicitamos audiencia... (y) hoy hemos hablado tanto con la canciller como con el presidente, al cual queremos agradecerle el gesto que ha tenido" , destacó Pastrana.
Entre los temas de conversación resaltó "el mensaje muy claro" dado a Maduro referente al "respeto de los resultados del día de mañana (domingo)" .
Al respecto "el gobierno ha sido muy claro, al decir el presidente Maduro que está dispuesto a aceptar cualquier sea el resultado electoral. El presidente (Maduro) espera que mañana sean una elecciones en paz, en tranquilidad", indicó Pastrana.
La misión aprovechó la oportunidad para pedir que permita el ejercicio del voto a líderes opositores detenidos como Leopoldo López, preso en una cárcel militar y condenado a casi 14 años de prisión, que sin embargo tiene vigentes sus derechos políticos al no tener todavía una sentencia firme tras apelar la condena.
López fue sentenciado en septiembre pasado tras ser acusado de promover unas protestas violentas en Caracas en febrero de 2014, condena que fue rechazada por el dirigente, sus familiares y abogados, quienes alegan que no se le siguió el debido proceso y no había pruebas en su contra. Pastrana indicó que entre lunes y martes espera que finalmente pueda visitar a López en la cárcel, un pedido repetidamente negado por las autoridades.
Pastrana, sin embargo, agregó que las dudas que traían sobre el proceso electoral venezolano, " desafortunadamente no se nos respondieron".
Maduro había adelantado que el encuentro con los exgobernantes tendría como propósito el que "yo quiero verles los ojos... y decirles 'bienvenidos'''.
El mandatario manifestó el martes pasado que quería decir a esos expresidentes y a las figuras que acompañarán a la misión de la Unasur encabezada por el expresidente dominicano Leonel Fernández que "abra los ojos para que vea al pueblo y vea la verdad de lo que va suceder el 6 de diciembre en la democracia bolivariana venezolana".
Maduro también recibió separadamente en su despacho al exmandatario español José Luis Rodríguez Zapatero y al expresidente panameño Martín Torrijos, quienes fueron invitados por el organismo electoral para participar como acompañantes electorales oficiales en los comicios.
Zapatero comentó a la prensa que habló con Maduro "de todos los temas que ya se imaginan. Del proceso electoral, de la situación política". Sin aportar otros detalles, argumentó que tenía que ser prudente "por respeto por la ciudadanía de Venezuela", pero que el lunes daría su informe sobre todo lo que registre durante la elección.
Ante la pregunta sobre los detalles de su previo encuentro con líderes de oposición, Zapatero señaló que ha "escuchado sus planteamientos, nos quedan sus inquietudes, las problemáticas, algunas de ellas las he podido trasladar a la propia presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE) y mañana también estaré pendiente observando el desarrollo" de los comicios.
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Dada la imposibilidad que los comicios legislativos de diciembre cuenten con la supervisión de alguna organización como Naciones Unidas o la Organización de los Estados Americanos (OEA) , los opositores confían en que sus invitados internacionales y los propios venezolanos estarán atentos para registrar posibles irregularidades. Las autoridades venezolanas solo invitaron a Unasur.
Sin embargo, los invitados de los adversarios del gobierno estarán limitados en esa labor por no contar con el aval del CNE, organismo en el que cuatro de sus cinco directivos son vistos generalmente como cercanos al oficialismo.
La oposición, que por primera vez en 17 años figura como favorita para vencer en la consulta electoral, ha acusado al gobierno de utilizar medios estatales y recursos públicos para hacer campaña y movilizar a sus seguidores. Por su parte, el oficialismo ha denunciado que los opositores buscarían generar violencia para afectar el proceso.
