Jerusalén. El Ejército de Israel reforzó este miércoles su presencia en Cisjordania y cerca de la franja de Gaza, un día después del anuncio del plan estadounidense para Oriente Medio, acogido de forma mayoritariamente positiva por los israelíes, mientras que en los territorios palestinos generó rechazo absoluto.
En Cisjordania y en la franja de Gaza hubo nuevas manifestaciones este miércoles contra el plan, que dejaron varios heridos. Los líderes palestinos consideran que el plan, que el presidente estadounidense, Donald Trump, presentó el martes en Washington junto al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, favorece a los intereses israelíes.
El presidente palestino, Mahmud Abás, que en los últimos meses declinó las ofertas de diálogo de Washington, afirmó que el plan “no pasará”.
El plan de la Casa Blanca le daría a Israel soberanía sobre el valle del Jordán, una gran área estratégica de la Cisjordania ocupada desde 1967 donde el Ejército israelí acaba de fortalecer su presencia, y que se convertiría en la frontera oriental de Israel.
Con una bandera palestina en la mano, Thabit Atiya, de 52 años, se manifestó este miércoles en Tubas, en ese valle.
“Estoy aquí para expresar mi oposición al plan de Trump”, declaró. “Quiero mostrar que Palestina no está vacía y que sus habitantes originales siguen aquí”.
Sin embargo, el miércoles por la noche, tras esas manifestaciones,el Ejército anunció refuerzos con “tropas de combate suplementarias”.
Por la noche, se registró el disparo de un cohete contra Israel procedente de la franja de Gaza, indicó el Ejército israelí.
De acuerdo con el plan, Jerusalén seguirá siendo “la capital indivisible de Israel”, y se propone crear una capital del Estado palestino, en los alrededores de Jerusalén Este.
Algo inaceptable, responden los palestinos. “Es imposible para cualquier niño, árabe o palestino, aceptar que no se tenga Jerusalén” como capital de un Estado palestino, expresó Abás, una posición que comparte Hamas, el movimiento islamista que controla la franja de Gaza, enclave geográficamente separado de Cisjordania.
Estado palestino, según plan de Trump
FUENTE: PLAN DE PAZ DEL PRESIDENTE TRUMP. || w. s. / LA NACIÓN.
“El llamado equipo estadounidense por la paz únicamente copió y pegó el plan de Netanyahu y de los colonos”, sostuvo Saëb Erekat, secretario general de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP).
“Este plan no aportará ninguna solución y fomentará las tensiones, y probablemente más violencia y derramamiento de sangre”, sostuvieron las iglesias católicas de Tierra Santa en un comunicado conjunto.
Israelíes complacidos
En cambio, en el lado israelí, las reacciones fueron otras.
“La historia ha tocado a nuestra puerta anoche (martes) y nos ha dado la oportunidad única de aplicar la ley israelí en todas las colonias en Judea y Samaria (nombre que las autoridades israelíes dan a Cisjordania) y en el valle del Jordán” se congratuló el miércoles el ministro de Defensa, Naftali Bennett.
Aún así, hubo miembros de la derecha radical, aliada de Netanyahu, que se opusieron al a parte del plan estadounidense que plantea la creación de un Estado palestino desmilitarizado.
“No dejaremos que la seguridad de localidades de Judea y Samaria sea amenazada”, afirmó Ysrael Gantz, uno de los dirigentes de las colonias del sector de Ramala.
En ese contexto, y ante la inminencia de las elecciones del 2 de marzo, el jefe del partido Azul-Blanco, Benny Gantz, principal rival de Netanyahu, pidió el miércoles por la noche que el Parlamento israelí pueda votar "sobre el conjunto" del plan propuesto.
En el extranjero, el plan fue recibido de forma circunspecta, salvo en Ankara y Teherán, donde se topó con un vivo rechazo. Irán lo tildó de “traición del siglo”.
Por su parte, Naciones Unidas subrayó que seguiría defendiendo las fronteras definidas en 1967, como también hizo Jordania.
Egipto, que al igual que Jordania, firmó un acuerdo de paz con Israel, adoptó una posición prudente, instando a las dos partes a un "examen atento" del plan.
Francia insistió el miércoles en la necesidad de una solución con dos Estados que respete el Derecho Internacional.
Arabia Saudí manifestó que “aprecia” los esfuerzos de Trump e instó a negociaciones directas entre israelíes y palestinos, pero también expresó su apoyo “inquebrantable” a los segundos.