Pretoria. AFP. El fiscal Gerrie Nel pidió ayer una condena de al menos diez años de cárcel para el atleta paralímpico sudafricano Óscar Pistorius, culpable del homicidio involuntario de su novia Reeva Steenkamp en febrero del 2013.
La jueza Thokozile Masipa, quien preside el tribunal desde hace más de siete meses, anunciará su sentencia el próximo martes.
En el último día de los alegatos del proceso, el abogado de Óscar Pistorius pidió ayer una condena a trabajos de interés general para el atleta, al argumentar que ya había sufrido bastante tras el homicidio involuntario de su pareja.
Tras casi una hora de alegato, Barry Roux reclamó “una condena útil para la sociedad”. Antes, el abogado había intentado convencer de que los remordimientos del acusado eran sinceros y de que Pistorius solo deseaba una cosa: “hacer todo el bien posible”.
Mientras que el fiscal Gerrie Nel tomó después la palabra para exigir una condena más dura.
El abogado alegó que “ningún castigo puede ser peor que el que (Pistorius) atravesó desde hace 18 meses”, al recordar que el atleta fue presentado por la prensa del mundo como un asesino frío.
La jueza aceptó en setiembre la versión de Pistorius, según la cual mató a su novia, Reeva Steenkamp, de cuatro balas disparadas a través de la puerta del baño, creyendo que era un ladrón.
Roux insistió en los “sinceros remordimientos” del atleta por haber matado a alguien que amaba.
“El dolor de Óscar nunca desaparecerá (...); el traumatismo emocional es el peor castigo”, insistió, al evocar que el antiguo campeón lo había “perdido todo” y que ya no tenía dinero.
Pistorius lloró cuando Barry Roux describió su caída, pues pasó de ídolo deportivo a asesino.
Por último, la defensa trajo a colación varios casos de la jurisprudencia sudafricana, donde un acusado que había matado a un miembro de su familia en circunstancias similares no cumplió condena o cumplió una pena no carcelaria.