Ginebra. Un tribunal suizo accedió este jueves a la liberación de un exdirector de la policía de Guatemala antes de que concluya su condena de 15 años de prisión por complicidad en el asesinato de prisioneros en la nación centroamericana.
Erwin Johan Sperisen, nacido en 1970 y que afirma su inocencia, deberá ser liberado el próximo lunes, según informó a esta agencia uno de sus abogados, Florian Baier, después de la audiencia.
La decisión se trata de una “suspensión de la ejecución de la pena” mientras se espera que el tribunal federal, que es la máxima instancia judicial suiza, se pronuncie sobre la reciente sentencia emitida por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos.
El 13 de junio, la Corte Europea con sede en Estrasburgo condenó al país alpino debido a la falta de imparcialidad de una jueza que se pronunció sobre el caso de Sperisen, quien posee doble nacionalidad, suiza y guatemalteca.
Según la Corte, las observaciones de la magistrada realizadas en octubre de 2017 tras una solicitud de Sperisen “excedieron la declaración de una simple sospecha”.
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Sperisen fue condenado por primera vez en 2014 a cadena perpetua por su supuesta participación en la ejecución extrajudicial de diez prisioneros en 2005 y 2006, cuando ocupaba el cargo de director de la Policía Nacional Civil de Guatemala. (pexels.com)
Luego de esta sentencia, el tribunal federal suizo puede decidir absolver a Sperisen, cerrar el caso o instruir un nuevo juicio, señaló el abogado Baier.
El condenado fue director de la Policía Nacional Civil de Guatemala y dejó el cargo en 2007 para radicarse en Suiza.
La justicia suiza lo condenó por primera vez en 2014 a cadena perpetua por su papel en la ejecución extrajudicial de diez reclusos entre 2005 y 2006, mientras ejercía como director de la fuerza armada guatemalteca. Esta sentencia fue confirmada en apelación en 2015.
No obstante, en 2017, el tribunal federal suizo, que es la máxima instancia judicial, anuló la condena al considerar “arbitraria” e “incompleta” la apreciación de algunas de sus pruebas.
Después de cumplir cinco años en prisión, Sperisen fue liberado provisionalmente con un brazalete electrónico en setiembre de 2017, en espera de un nuevo juicio.
En 2018, la justicia de Ginebra finalmente lo condenó a 15 años de prisión por complicidad en el asesinato de siete reclusos en 2006 en la prisión de Pavón. En la sentencia, fue absuelto de la muerte de otros tres prisioneros que escaparon de la prisión de El Infiernito en 2005, pero que luego fueron recapturados.
Sperisen, casado y padre de tres hijos, se instaló en Ginebra en 2007, en la casa de su padre, quien fue embajador de Guatemala en la Organización Mundial de Comercio (OMC).
Fue detenido en 2012 por un grupo de policías cuando salió del perímetro de la misión guatemalteca para hacer compras junto a su esposa.